Oruro nació como departamento el 5 de septiembre de 1826, era una región prometedora y pujante, pues su importancia radicaba en la actividad minera, ya que se encontraron ricos yacimientos de plata por entonces, lo cual llamaba la atención de propios y extraños, es por eso que Antonio José de Sucre decidió su creación.
Después de firmarse la independencia y creación de Bolivia como República, Bolívar asumió la presidencia el 12 de agosto de 1825, llegó a La Paz y de allí se dirigió a Potosí "donde cumplió su promesa de subir al Cerro para enarbolar en él la bandera de la libertad", según datos de Carlos Mesa Gisbert.
Bolívar en calidad de Presidente y protector de la nación que llevaba su nombre, se propuso muchas metas administrativas, entre las que destacan algunas como la creación de la contaduría para el manejo de los fondos públicos. Encargó a Simón Rodríguez que elaborara un proyecto educativo, abolió el tributo indígena, la mita y los cacicazgos, prohibió que los originarios sirvieran contra su voluntad y muchas otras más.
Otra de las medidas que asumió Bolívar fue que el puerto de Cobija, en el Litoral boliviano, fuera denominado puerto La Mar, con lo que se comprueba que esta nación andina nació a la vida libre con una costa marítima, lo cual muchos políticos chilenos niegan en la actualidad.
En diciembre de 1825, Bolívar tuvo necesidad de trasladarse a Lima, Perú, para inaugurar el Congreso, por lo que delegó la administración de la nueva nación al Mariscal Sucre a través de un decreto firmado el 29 de ese mes, y en su ausencia, la responsabilidad recayó en la persona del Mariscal de Santa Cruz.
Bolívar abandonó Chuquisaca el 10 de enero de 1826, habiendo delegado la presidencia, y dejó el territorio boliviano a fines de ese mes, según Mesa.
Entonces Antonio José de Sucre se hizo cargo del mando de la nación "muy a pesar suyo", pues no ambicionaba un mando político, pues según los historiadores, era un hombre honesto, sencillo, sin ambición personal, fiel y leal, además muy perspicaz e incorruptible.
A Sucre le correspondió la tarea de "reactivar la economía y de sostener una política de reformas revolucionarias que significaban un cambio sustancial en todos los estratos de la sociedad", según el libro Historia de Bolivia de Carlos Mesa.
El historiador orureño, Alfonso Gamarra Durana (+) aporta los siguientes datos:
"El Mariscal de Ayacucho cruzó el Desaguadero, ingresó al Alto Perú y el 9 de febrero de 1825 decretó una convocatoria a una asamblea de diputados de las provincias para que allí decidieran su futuro: elegir entre el Perú o las Provincias Unidas del Río de La Plata, pues los antecedentes históricos mostraban alternancia en su pertenencia, Sucre convocó originalmente a la magna reunión en Oruro para que los pueblos determinaran su destino".
Los políticos hicieron cambiar la sede de la junta de representantes, que finalmente se realizó en la capilla de la universidad de Chuquisaca. No sólo se trasladó la magna asamblea a Chuquisaca, sino que Oruro fue la hija olvidada, considerado esto como una injusticia, puesto que "llevados por las referencias del pasado inmediato, omitieron en la letra de los decretos, a la villa de Oruro y su territorio".
"Tuvo que transcurrir nueve meses para que se reparara la injusticia porque Oruro estaba allí, materialmente en suelo, físicamente presente", señala Gamarra en su libro Panorama del acontecer heroico en Oruro.
En Chuquisaca, se aprobó la existencia jurídica de Oruro como departamento el 4 de septiembre de 1826 con un decreto promulgado 24 horas después por el Mariscal de Ayacucho.
En el mismo decreto se fijó a la ciudad de Oruro como capital del departamento, que había sido creado con tres provincias, que en la actualidad son 16.
En el anuario del Banco de la Nación Boliviana de 1825-1826, presenta el tenor del texto redactado para la erección de Oruro en departamento y señala lo siguiente:
"El Congreso jeneral constituyente de la República Boliviana, ha sancionado lo siguiente:
Art. 1º Se erije un nuevo departamento al oeste de la República, compuesto por ahora, de las provincias de Oruro, Paria y Carangas.
2º La capital de este departamento será la ciudad de Oruro.
3º En la nueva división que hade hacerse del territorio de la República, se le señalarán límites proporcionados.
4º Comuníquese al poder Ejecutivo para su publicación y cumplimiento. Dada en la sala de sesiones en Chuquisaca a 4 de setiembre de 1826. Matías Terrazas, presidente._Manuel José de Asín, diputado secretario._José María Salinas, secretario._Palacio de gobierno en Chuquisaca a 5 de setiembre de 1826._Ejecútese_ Antonio José de Sucre._El ministro del Interior, Facundo Infante." Sic.
En la actualidad Oruro posee 16 provincias, divididas en 35 secciones municipales y 175 cantones.
La extensión del departamento de Oruro constituye el 5% del territorio nacional, con un total de 53.588 Km2, con una población de 340.114 habitantes.
Durante la época de auge de la minería, este departamento se constituyó en el sostén de la economía nacional y hasta sirvió para que departamentos como Santa Cruz pudieran alcanzar el progreso, lo que los habitantes de esta tierra ven que no es recíproco, pues conforme pasa el tiempo se margina más a Oruro del llamado "eje troncal" y hoy por hoy, por su ubicación estratégica de vinculación con los puertos de Chile y Perú, se impulsa el comercio que es su esperanza para resurgir de sus cenizas, como el ave fénix que aparece en su escudo, logrando recuperar su pasado glorioso como ciudad cosmopolita y departamento que impulsa el desarrollo y la pujanza de su economía y la del país.
Bibliografía consultada:
Anuario 1825-26 del Banco de la Nación Boliviana, Colección Oficial de leyes, decretos, órdenes y resoluciones.
Alfonso Gamarra Durana, Panorama del Acontecer Heroico en Oruro, Latinas Editores, 1998.
José de Mesa, Teresa Gisbert y Carlos Mesa Gisbert, Historia de Bolivia, séptima edición, Editorial Gisbert, 2008.
Instituto Nacional de Estadísticas.
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