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viernes, 28 de febrero de 2014

Discretos actos por los 453 años de fundación de la ciudad

En actos diversos tanto en la capital como en San José de Chiquitos, las autoridades locales honraron los festejos por los 453 años de la fundación de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra.

Por la mañana en la capital cruceña, el Alcalde lideró el acto cívico que se realizó en la Plaza del Cementerio que en realidad se llama Ñuflo de Chávez. Hasta allí llegaron autoridades municipales y departamentales y representantes de sectores sociales para la iza de la bandera y la ofrenda al fundador de la ciudad.

En la ocasión, el Alcalde leyó una breve reseña de la historia relatada por Hernando Sanabria. En un corto discurso también manifestó su solidaridad con el pueblo beniano que está padeciendo por las inundaciones.

Entre tanto en San José de Chiquitos, el Gobernador Rubén Costas y el Alcalde de este Municipio, Germaín Caballero firmaron un acuerdo para dar continuidad a la musealización del Parque Arqueológico Nacional Santa Cruz La Vieja.

Por la noche se llevó a cabo un polémico acto protocolar en el Concejo Municipal que decidió suspender la Sesión de Honor por solidaridad con el Beni, medida que fue cuestionada por la oposición del Alcalde que vio en la acción una medida política.

miércoles, 26 de febrero de 2014

Chaves ha sido el precursor de la historia de Santa Cruz, a él le acompañaron otros protagonistas que nunca quedarán en el olvido.

La fundación de Santa Cruz de la Sierra hace 453 años ha tenido muchos protagonistas, algunos reconocidos otros más anónimos, que han aportado a la historia; sin embargo, por cuestiones de espacio y luego de consultar algunos libros e historiadores le mostramos algunos de los precursores.

El Conquistador

El capitán Ñuflo de Chaves nació en Villa de Santa Cruz de la Sierra, Cáceres-Extremadura en España, probablemente en 1516.

Llegó al continente americano con el segundo adelantado del Río de la Plata, junto a Álvar Núñez Cabeza de Vaca. Ambos desembarcaron en el puerto de Santa Catalina, (hoy Florianópolis - Brasil), en 1541. De allí pasó a Asunción donde llegó en 1542, en esa ciudad se casó con Elvira de Mendoza, según el libro “Vistas de nuestro pasado”, del historiador Carlos Cirbián.

Convencido de la existencia del reino del Gran Paitití, en 1558, zarpó del Paraguay internándose en las tierras de los Itatines (guaraníes), acompañado de su lugarteniente Hernán de Salazar.

La expedición que tenía como misión fundar una nueva ciudad en la provincia de Xarayes, estaba integrada por 150 españoles, arcabuceros o de a caballo.

Después de una larga travesía por tierra desde el Atlántico, tomó parte activa en los acontecimientos de que fue escenario la colonia paraguaya bajo los gobiernos de Álvar Núñez y Martínez de Irala. Muerto Irala, Ñuflo se propuso seguir la obra de conquista y colonización que aquel había empezado.

Decidido a acometer una empresa por cuenta propia, en 1558 se adentra con su gente por el territorio del país de los Tamacocis, a orillas del río Guapay. Allí en 1559 funda una ciudad para que sirva de base de operaciones.

Y se produce su encuentro con una misión llegada de Perú con poderes del virrey para colonizar la nueva comarca.

Coincide con la idea de emanciparse de la colonia paraguaya e incorporarse a la obra colonizadora del Perú y viaja a Lima, realizando una verdadera hazaña.

Sanabria Fernández relata que Chaves logra la aprobación del virrey Cañate, quien lo designa gobernador. A su retorno a la comarca, junto a su gente funda en la vega del Sutó una ciudad de nombre Santa Cruz de la Sierra el 26 de febrero de 1561.

Juan de Ágreda Garcés

Participó en la repartición de encomiendas a los primeros pobladores de Santa Cruz y fue nombrado Alcalde Ordinario al formarse el primer cabildo de la ciudad.

Pedro Téllez Girón

Fue Alcalde Mayor Ordinario y formó parte del primer Cabildo de Santa Cruz. Recibió encomienda de Santa Cruz y también fue uno de los firmantes como testigo en el documento respectivo.

Juan de Garay

Conquistador español que vino de Perú y se incorporó a la conquista del Río de la Plata cuando Ñuflo de Chaves regresó de su segundo viaje de Lima, Perú.

Diego de Mendoza.

Nació en Asunción, es hijo del capitán Francisco de Mendoza y de doña María Angulo.

Desde joven acompañó a su cuñado Ñuflo de Chaves. En 1558 salió de Paraguay y entró a lo que hoy es el oriente de Bolivia,

Dejadas las aguas del río Paraguay, llega junto a Chaves a la región de Chiquitos septentrional, hasta las orillas del río Guapay donde se funda la Barranca o Nueva Asunción (1559).

Antes de la fundación de Santa Cruz de la Sierra, acompaña a su jefe en las sucesivas jornadas, especialmente en la entrega a los Xarayez, posteriormente regresó con Chaves a Asunción para traer más gente a la recién fundada ciudad.

Después de haber sido fundada Santa Cruz de la Sierra y tras la muerte del líder regresó, cuando fue nombrado gobernador interino por el cabildo de la ciudad, que no reconoció el virrey Toledo y puso en su lugar a Juan Pérez de Zurita.

Hernán de Salazar.

Vino de España con la expedición dirigida por doña Mencia Calderón de Sanabria, siendo de los primeros capitanes en llegar a Asunción con otros 30 españoles. Contrajo nupcias con la hermana de doña Elvira de Mendoza, incorporándose a la familia de Chaves que lo nombró su lugarteniente. Con Chaves fue a Xarayez, le prestó su apoyo en la pugna sostenida con Andrés Manso, viajando a Lima a defender los derechos de Chaves.

Junto a Chaves se entrevistó con el virrey Cañete quien designó al primero como gobernador de las tierras que habían conquistado.

Presidió el primer cabildo reunido el 5 de mayo de 1961. Después de la muerte de Chaves acompañó a la familia de Ñuflo en el destierro ordenado por el virrey Toledo.

Santa Cruz La búsqueda de 'El Dorado' motivó su fundación

Santa Cruz de la Sierra tiene una historia única. Fue fundada como la base desde donde los conquistadores españoles buscaron El Dorado para hacerse con sus riquezas. Su origen fue San José de Chiquitos; sin embargo, vivió dos traslaciones para finalmente establecerse en el lugar donde ahora se desarrolla.

La fundación.

Santa Cruz de la Sierra fue fundada por el capitán español Ñuflo de Chaves el 26 de febrero de 1561, tras una expedición integrada por más de 100 españoles que partieron de Asunción. La nueva población fue bautizada como Santa Cruz de la Sierra en honor a la ciudad natal de Ñuflo de Chávez en Extremadura, España.

Esta fundación se realizó a orillas del arroyo Sutó, en la serranía de Chiquitos, como una avanzada al este de los territorios ocupados por España, próximos a donde hoy se asienta San José de Chiquitos.

La expedición que dio origen a esta fundación, en las serranías de Chiquitos, estuvo conformada por 158 españoles y alrededor de 1.500 indígenas, procedentes de Asunción, Paraguay. En este lugar del asentamiento, más específicamente a solo 3 km. al sur de lo que hoy es San José de Chiquitos, se ha convertido en el Parque Nacional Histórico Santa Cruz La Vieja, donde se puede observar los trazados que se hicieron para su población.

En 1568, Chaves murió asesinado por el cacique Sacuaratáo, mientras realizaba una expedición hacia tierra de los itatines.

A partir de ese año comienza una etapa difícil para la ciudad, pues vivió un desamparo, alejándose de los centros de poder.

Su marginalidad, aislamiento y dedicación a la guerra con los indígenas la habían empobrecido. Las sequías y las malas cosechas diezmaban a la población que emigraba a nuevas localidades.

Primera Traslación.

El 21 de mayo de 1595 se fundó San Lorenzo de la Frontera, que se encontraba a medio camino entre Santa Cruz de la Sierra y la Audiencia de Charcas. Esto era desfavorable para los cruceños que se encontraban lejos y su producción, especialmente el azúcar tardaba en llegar a Potosí, que era su principal mercado.

A esto se sumaba la falta de agua que provocaba malas cosechas. Fue entonces que se decidió el traslado a Cotoca. De esta manera, la ciudad estaba más cerca de los centros de poder; sin embargo, la zona no era del todo segura pues recibía ataques de los nativos y las lluvias entre noviembre y abril provocaban grandes inundaciones.

Segunda Traslación.

En noviembre de 1621, el Rey de España solicitó al gobernador de Santa Cruz de la Sierra, Don Nuño de la Cueva, que realice una consulta a los habitantes de Santa Cruz de la Sierra para saber si querían o no fusionarse con la ciudad de San Lorenzo. En ese momento, se encontraba ubicada en la zona de Cotoca, a veinte kilómetros de San Lorenzo. El Gobernador consulta a los habitantes de Santa Cruz de la Sierra, al Cabildo y a los padres jesuitas, para saber su opinión. Finalmente todos coinciden en que era necesario el traslado de Santa Cruz de la Sierra a San Lorenzo y la fusión de ambas ciudades.

A partir de 1622, las dos ciudades se fusionan y se vuelven una sola. Por lo tanto la Gobernación de Santa Cruz de la Sierra tiene como capital la ciudad de San Lorenzo también llamada de Santa Cruz de la Sierra. Y se ubica a orillas del río Piraí. Por lo tanto, Santa Cruz de la Sierra es la capital de la Gobernación y la sede del Obispado de Santa Cruz de la Sierra.

Símbolos que identifican al cruceño

La bandera cruceña, el himno de Santa Cruz, el escudo con la cruz potenzada, el sombrero de saó y el patujú son símbolos que identifican a los cruceños. Con el objetivo de rememorar su significado le damos a conocer algunos detalles de como fueron creados.

La bandera

Es uno de los emblemas que más identifica a los cruceños. Fue creada mediante Decreto Prefectural del 24 de julio de 1864, por Tristán Roca quien entonces ejercía como prefecto.

El verde de la bandera cruceña simboliza la vegetación de las selvas, llanuras y montañas de la geografía regional.

Asimismo, la viva esperanza de un futuro mejor. El blanco representa la pureza, la hidalguía y la nobleza del cruceño, pero además su patriotismo y la franqueza que siempre ha caracterizado a este pueblo.

Tras ignorarse durante mucho tiempo la existencia de la bandera cruceña, el Comité pro Santa Cruz informó de su creación y presentó públicamente este emblema regional el 11 de noviembre de 1980, en acto realizado en el patio de honor de la sede cívica. En esa ceremonia izó oficialmente la bandera cruceña el Dr. Rodolfo Roda Daza, en su calidad de presidente de la institución cívica.

El 24 de junio de 1981, el directorio del Comité pro Santa Cruz, que era presidido por el Dr. José Luis Camacho Parada, aprobó una resolución, declarando el 24 de julio como el Día de la Bandera Cruceña. Contribuyeron al rescate de este símbolo el historiador Hernando Sanabria Fernández.

Escudo

Fue otorgado a la “muy noble y leal” ciudad de Santa Cruz de la Sierra, por el Rey de España, Felipe IV, mediante Cédula Real, expedida en Madrid el 7 de noviembre de 1636. La Cédula fue entregada a don Juan Pizarro, que se desempeñaba como procurador general de nuestra ciudad ante la Corte Española. La recibió en esta tierra, a principios de 1638, el gobernador don Cristóbal de Sandoval y Rojas.

Pasaron varias generaciones antes de que fuera conocido y utilizado de manera oficial probablemente por la disputa de soberanía con San Lorenzo.

Por Decreto Prefectural Nº 11/85 de 23 de abril de 1985, el Gobierno departamental aprobó, en todos sus términos, una trascendente Resolución del IV Congreso Cívico de la Cruceñidad, mediante la cual se adoptó este escudo como símbolo y emblema del departamento. Dicho Decreto fue suscrito por el entonces prefecto de Santa Cruz, Lic. Freddy Landívar Arauz, y el secretario de la Prefectura, Dr. Remberto Ulloa Sandoval.

Es el más antiguo de los símbolos que tiene Bolivia.

Patujú

Durante mucho tiempo fue considerada como un símbolo nacional por su tricolor rojo, amarillo y verde; sin embargo, en junio del 2013 fue nominada oficialmente como símbolo cruceño gracias a la aprobación de una ley aprobada por la Asamblea Legislativa Departamental.

La flor de patujú representa el modelo de desarrollo cruceño, basado en el aprovechamiento de los recursos naturales renovables y la protección del medio ambiente.

Sombrero de saó

Elaborado con hojas de palmera, es una obra maestra de la artesanía rural. Progresivamente ha mejorado en calidad y embellecido su forma por generaciones de artesanos que la elaboran desde hace más de tres siglos.

En julio de 2007, mediante Ley 3708, se declara e instituye como símbolo cultural cruceño, exhortando a las personas y autoridades públicas y privadas, usarlo como muestra de respeto e identificación, con los valores cruceños en todos los actos cívicos patrios, efeméride departamental, feriados y fiestas religiosas notables.

Hace 453 años Ñuflo de Chaves iniciaba una expedición que partía desde Paraguay con el objetivo de encontrar el 'mítico' El Dorado.

El tiempo le ha dado la razón al conquistador español. En torno a la ciudad que fundó, se creó un departamento que ahora es el motor económico de Bolivia. Como hace más de cuatro siglos y medio, aquí llegan migrantes de otros departamentos, pero también desde el exterior, encontrándose con excelentes oportunidades para lograr el éxito económico y mejores condiciones de vida para sus familias.

No son pocas las historias que se conocen de quienes llegaron solo en plan de visita, pero quedaron conquistados por el cielo más puro de América, la hospitalidad del cruceño y la belleza natural que se la puede observar en cada rincón del departamento.

El Dorado de este siglo XXI tiene calles y avenidas modernas, pero también requiere de una mejor y mayor apuesta en todos los ámbitos y esto implica compromiso de parte de los ciudadanos.

Es cierto que la inversión social de parte del Estado, sea Alcaldía, Gobernación o Gobierno Central son imprescindibles, pero el desarrollo no solo se mide en base a la infraestructura del departamento, también existen indicadores que miden el desarrollo social y es aquí donde el ciudadano puede realizar importantes aportes aún siendo de ejecución sencilla.

Solo como ejemplo, existen ciudades más pequeñas en Sudamérica, pero con una gran conciencia en cuanto a la limpieza y la basura, evitando tirar los desperdicios, por mínimos que fueran, en cualquier esquina.

O en el tema del tráfico, ciudades con similar cantidad de vehículos respetan al peatón y los semáforos, evitan el uso innecesario de las bocinas.

Son pequeños detalles, que bien pueden ser realizados por los ciudadanos. Esto forma parte de la cultura y como lo dijimos en párrafos anteriores, también forma parte del desarrollo de una ciudad en constante crecimiento.

Santa Cruz cumple 453 años con un explosivo crecimiento

Santa Cruz de la Sierra es una ciudad que crece demasiado rápido. En ocasión de su 453 aniversario de fundación, los historiadores destacan y celebran el hecho de que la urbe cruceña se haya convertido en la segunda ciudad con mayor crecimiento poblacional entre las 15 capitales que encabezan el ranking mundial: con 3,98%, solo superada por Toluca, de México, que tiene 4,25%.

El profesor e historiador, Héctor Molina, destaca "los saltos gigantescos a nivel urbano y poblacional desde 1960 hasta la actualidad", pues ha crecido de 80 mil a 2,6 millones de habitantes. Sin embargo, Molina lamenta que la formación cultural de los ciudadanos no haya ido a la par del crecimiento urbano. "Es una ciudad ultramoderna con un desarrollo extraordinario", sostuvo Molina.En Santa Cruz, según el Censo del 2012 hay 2.655.084 habitantes.

Destacan la riqueza cultural. La historiadora Paula Peña, al igual que Molina, destaca la transformación que ha tenido la ciudad y pondera "Santa Cruz es una ciudad cosmopolita que ha crecido mucho, gracias a la migración extranjera y nacional. Es una urbe emprendedora y madre de otras ciudades", explicó Peña. La historia cree que hay una identidad cruceña y que pese a la modernización se mantiene.

martes, 25 de febrero de 2014

Santa Cruz Inician homenajes por los 453 años de la fundación

Los actos para realzar la fiesta de aniversario por los 453 años de la fundación de Santa Cruz de la Sierra, ya empezaron tanto en la capital como en la cuna de la cruceñidad, San José de Chiquitos.

Ayer el concejal Rómel Pórcel anunció la aprobación de una ley municipal que insta al embanderamiento de la ciudad en instituciones públicas y privadas. Promovió esta acción cívica entregando banderas en la plaza 24 de Septiembre.

Entre tanto, en San José de Chiquitos, los actos para realzar esta fecha cívica iniciaron la anterior semana con la realización de la Feria del Libro Josesana que culminó ayer en la tarde.

Asimismo, para esta noche se tiene prevista la gran serenata a Santa Cruz, con la presencia de artistas locales tanto de San José como de la capital.

San José apunta a potenciar el paseo arqueológico. De acuerdo con el alcalde de esta localidad, Germaín Caballero, los actos alusivos a la fecha se concentrarán en esta localidad, es por eso que tienen previsto una serie de actividades que apuntan a promover y concretar el proyecto musealización del Parque Histórico Nacional Santa Cruz la Vieja.

"Para nosotros esta es una fecha muy importante porque nos permite asegurar el compromiso de las autoridades para apoyar la recuperación y puesta en valor del parque Santa Cruz la Vieja que es parte del patrimonio histórico cultural, de Santa Cruz y de todo el país", señaló Caballero.

En este sentido, la autoridad anticipó una Sesión de Honor en las instalaciones del paseo histórico hasta donde llegarán autoridades locales y departamentales.

Para la ocasión también se tiene prevista la presentación de la primera etapa de la muestra del proyecto que musealizará los últimos hallazgos de la estructura urbana de Santa Cruz la Vieja, en primera instancia de la iglesia La Merced.

Este trabajo será posible gracias a una inversión de 4 millones de bolivianos que serán costeados por la Gobernación cruceña y la Alcaldía Josesana.

Asimismo, ambas reparticiones inaugurarán la obra que permitirá hacer posible la construcción de una nueva terminal de transporte para San José.

El Concejo promete un acto abierto a los vecinos. Por otro lado en Santa Cruz, la Alcaldía tiene prevista la realización de un acto cívico que se realizará a partir de las 20:00, en las instalaciones del Concejo Municipal.

De acuerdo con fuentes oficiales del organismo deliberante, el acto estará abierto a todo público ya que se habilitarán dos ambientes, uno para las autoridades nacionales y locales y otro para los vecinos que deseen participar del evento.

"Esperamos la presencia de más de 1.000 vecinos y también hemos hecho la invitación a las primeras autoridades nacionales, aunque no nos han confirmado aún su presencia", sostuvo el edil.

"Queremos que todo Santa Cruz se una a esta actividad cívica no solo con su presencia, sino también enarbolando la verde blanco y verde”, señaló mientras repartía la bicolor entre los vecinos.

En este mismo contexto, la autoridad manifestó que con el afán de resaltar la historia cruceña y para promover el civismo en el acto de honor, se tiene prevista la presentación de un documental que mostrará la historia del escudo cruceño.

Por otro lado, descartó que se hagan reconocimientos o distinciones a personajes destacados.

El Comité se suma con la promoción de pacto fiscal. Por su parte, el Comité Cívico de Santa Cruz, anunció la realización de una Sesión de Honor y la rendición del informe de la institución. Asimismo, la institución indicó que abordará el pacto fiscal como principal temática para difundir entre las instituciones presentes.

Esteban Arze, héroe


El “caudillo del valle” en la Guerra de la Independencia, Esteban Arze, fue declarado “Héroe Departamental” al conmemorarse el 199 aniversario de su muerte.

En la ocasión, la Gobernación descubrió el busto del general que combatió al yugo español.

Gregorio Collque

La noche del 25 de febrero de 1879, un hu-milde campesino, mostrando signos de agotamiento, bajaba en rauda carrera, desde la Ceja de El Alto hacia el centro de la ciudad, portando entre sus escasas pertenen-cias una terrible noticia que causaría sorpresa, conmoción e ira entre las altas esferas guber-namentales como en la ciudadanía paceña y nacional.

Este valiente y sacrificado héroe era el chas-qui o mensajero Gregorio Collque, a quien en Tacna, Perú, se le había confiado la delicada misión de llevar la noticia al gobierno de Hila-rión Daza de la invasión chilena al puerto de Antofagasta la mañana del 14 de febrero de 1879. Tras la ocupación algunas autoridades del puerto de dirigieron a Calama para organi-zar una fuerza de resistencia, otros partieron por mar hacia el Perú. El 19 de febrero se reunieron en Arica el coronel Zapata, el cónsul boliviano Juan Balza y Manuel Granier, este último había partido de Tacna hacia Arica, para poner al tanto de los dramáticos acontecimien-tos ocurridos en Antofagasta. Luego redactó una nota urgente para el gobierno de Daza, y siguiendo recomendaciones se eligió a Grego-rio Collque un indígena que conocía caminos y senderos para llegar a pie hasta la ciudad de La Paz y el 20 de febrero partió llevando la in-fausta noticia en sus manos. Por entonces el servicio de telegrafía era muy incipiente.

Desde Tacna recorrió serranías, cruzó ríos, planicies, soportando el frío de la cordillera, siempre en marcha forzada, descansando po-cas horas y casi sin comer entró en territorio boliviano el sábado 22 y el 23 ya se encontraba en San Andrés de Machaca, la mañana del martes 25 estaba en Tambillo muy cerca de la ciudad y por la medianoche se dirigía hacia el Palacio de Gobierno, pidiendo ver al Presidente Daza, como no se encontraba la nota fue entre-gada al coronel de policía José María Valdivia.

Finalmente, el jueves 27 de febrero de 1879, Hilarión Daza desde el púlpito de la Iglesia de San Francisco dio a conocer a los bolivianos la trágica noticia del asalto de las fuerzas chilenas al puerto de Antofagasta.

lunes, 24 de febrero de 2014

Santa Cruz la Vieja ya celebra los 453 años

Los festejos en homenaje a los 453 años de la fundación de Santa Cruz la Vieja empezaron con la apertura de la feria del libro y la entrega de la maqueta de musealización del Parque Santa Cruz la Vieja. El alcalde Germaín Caballero fue el encargado de inaugurar el evento en el que participan editoriales, librerías y autores de obras literarias, así como conferencistas, cuenta- cuentos y declamadores.
Caballero indicó que para este martes, a las 22:00, está programada la serenata en homenaje a la fundación de Santa Cruz con la participación estelar del Trío Oriental y Eleonor Cardona. Anunció juegos pirotécnicos y brindis de salutación a los 453 años de la edificación de Santa Cruz la Vieja.
Para el miércoles se programó el saludo a la aurora a las 6:00 a cargo de efectivos militares de la zona. A las 8:30 habrá una ofrenda floral en el monumento a Ñuflo de Chávez, en el Parque Santa Cruz la Vieja, a cargo del Cabildo Indigenal y la directiva de la Asamblea Departamental. A las 10:00 será la sesión de honor del Concejo Municipal en el mismo sitio arqueológico del parque.
A las 11:00 las autoridades tienen previsto un recorrido por el Parque Arqueológico Santa Cruz la Vieja. A las 13:00 se inaugura la refacción de la cubierta de la bóveda principal del Conjunto Misional a cargo de la Gobernación y el alcalde. A las 13:30 se abrirá el festival de comidas en el parque La Pauroca

Santa cruz de la sierra conmemora 453 años Alistan programa festivo por la fundación

El Concejo Municipal, la Asamblea Legislativa Departamental y el Comité Cívico están preparando el programa de festejos por los 453 años de fundación de Santa Cruz de la Sierra que se conmemoran este 26 de febrero.
Tanto el Concejo como la Asamblea Legislativa han cursado invitación a todas las autoridades locales y nacionales. Sin embargo, hasta el momento ni el presidente Evo Morales ni el vicepresidente Álvaro García Linera han confirmado su presencia en los diferentes actos festivos, aunque se esperará hasta mañana para saber si estarán en los actos de homenaje a Santa Cruz de la Sierra.

Programas de festejo
En el salón colonial del Comité pro Santa Cruz este miércoles se llevará a cabo la Asamblea de la Cruceñidad Ordinaria, a la que solo se ha invitado a autoridades locales y departamentales, no así a las nacionales, según expresó su presidente, Fernando Castedo.
En la oportunidad se condecorará con la cruz potenzada a Carmelo Caballero, Julia Casal y Delia Weise, que eran miembros de la FUL que formaron parte en la fundación del Comité en el año 1950 y que son los únicos que están vivos.
Desirée Bravo, presidenta del Concejo, señaló que el mismo miércoles, a las 19:30 horas, se llevará a cabo la sesión de honor en las mismas instalaciones. Una vez finalizada, se hará un vino de honor y posteriormente se iniciará la verbena popular en las afueras del Concejo en la que participarán renombrados artistas cruceños.
Con el propósito de que sus actos no se crucen con los del Comité ni los del Concejo y participen las autoridades, la Asamblea Legislativa Departamental está adelantando su acto mañana, a las 19:30, en el Palacio de la Gobernación de la plaza 24 de Septiembre, en el que se hará una reseña histórica de la fundación a cargo del historiador Alcides Parejas y luego se compartirá un vino de honor

domingo, 23 de febrero de 2014

¿Mensajes gráficos secretos en Tiahuanaco y el lago Titicaca?

En el año 1994 el investigador boliviano Guillermo Lange Loma publicó el libro “El mensaje secreto de los símbolos de Tiahuanaco y del lago Titikaka”, un texto de casi 400 páginas con ilustraciones y una importante bibliografía para respaldar sus apreciaciones respecto al pasado andino que se pierde en la noche de los tiempos y que hasta ahora estudiosos nuestros o extranjeros no han podido explicar.

Ese año, con excepción de EL DIARIO, ningún otro medio de comunicación escrito, radial o televisivo destacó la publicación de tan importante libro editado en La Paz.

Y aquí viene la novedad. Un periodista español, Antonio Cerdán Caparrós, leyó el libro en su país y al enterarse de su contenido, decidió visitar Bolivia para entrevistar a Guillermo Lange y obtener mayores datos sobre el contenido de las hipótesis relativas a la configuración del lago Titikaka y el mensaje gráfico mostrado en los dibujos de la Puerta del Sol y los monolitos de Tiahuanaco.

Caparrós escribió dos notas al respecto, que fueron publicadas en “Más Allá” y “Año Cero”, elegantes revistas internacionales de gran circulación en Europa, América Latina y Estados unidos.

En “Más Allá” (No. 120, febrero de 1999), la entrevista lleva el título de “Titikaka: lágrima de los dioses” y la siguiente introducción: “Los perfiles zoomorfos del lago Titikaka, así como los relieves que dejó una antigua civilización en Tiahanaco, tienen toda una lectura esotérica”. Seguidamente, el periodista español afirma que Lange, después de observar detalladamente las fotos del lago captadas desde un satélite, realizó su particular interpretación indicando que los contornos del lago Titikaka tienen figuras simbólicas donde sobresalen un puma, un pez, un hombre arrodillado, un ángel y un arca, simbología mostrada en los monolitos y en la Puerta del Sol.

En “Año Cero” (No. 12, marzo de 1999), la nota lleva el título de “Los Champollions de Tiahanaco”, con la siguiente inscripción: “Descifrados numerosos enigmas de la civilización tiahuanacota”.

En esta entrevista, Caparrós también logró declaraciones (sobre el mismo tema andino), de los investigadores bolivianos Alberto Laguna Meave, Jorge Emilio Molina y Javier Amaru Ruiz, éste último, autor de “Teoría de unificación en 10 dimensiones” (La Paz, 1977).

CRITERIOS DE LANGE

En “El mensaje secreto de los símbolos de Tiahanaco y del Lago Titikaka”, Lange destaca el trabajo de investigadores como Posnansky, Bennett, Villamil de Rada y Ponce Sanjinés, entre otros; además de Fernando Díez de Medina, a quién califica de poeta místico de Los Andes, filósofo y profeta, cuyos libros como “Nayjama” y “Tiahanaco” serán comprendidos en toda su magnitud en el futuro, “cuando la humanidad eleve su nivel de ser”.

La publicación de este libro alcanzó una tercera edición en abril del año 2004. En su presentación, el autor afirma que su investigación está dirigida a los buscadores de la verdad andina y que sus hipótesis (que se constituyen en tesis), son el fruto de un largo y minucioso análisis de los monumentos arqueológicos de Tiahanaco. Añade también que su contenido se basa en bibliografía especializada, acopio de datos de hemeroteca y, sobre todo, en viejas leyendas de América y en la investigación de la mitología universal.

viernes, 21 de febrero de 2014

El Concejo prepara actos de los 453 años de la ciudad

La sesión de honor que prepara el Concejo Municipal por los 453 años de fundación de la ciudad será el 26 de febrero, desde las 19:30, en el patio del edificio edil donde hay espacio para albergar a 400 invitados, entre ellos el primer mandatario, Evo Morales, y sus ministros, que no han confirmado su asistencia.
El presupuesto aprobado para el acto es de Bs 150.000, pues incluye una verbena popular con la participación de artistas locales de música folclórica. Para que los vecinos disfruten del espectáculo se instalará una pantalla gigante fuera del edificio donde se espera que asista un millar de personas.
La presidenta del Concejo, Desirée Bravo, refirió que también han sido invitadas autoridades nacionales, departamentales y ediles de provincias y de otros departamentos, así como miembros del cuerpo consular.
Por otra parte, el concejal secretario, Rómmel Pórcel, manifestó que se aprobó una ordenanza que instruye el adorno de edificios públicos y privados y domicilios con la bandera cruceña desde el 23 hasta el 28 de febrero

lunes, 17 de febrero de 2014

Mestizaje y amores de los conquistadores

El mestizaje en América hispana no fue sólo un producto de la sumisión de las mujeres indígenas a manos de los conquistadores españoles. De hecho, hubo historias de amor que contradicen la leyenda negra de España en América.
Y no es porque durante la conquista española del imperio inca no se produjesen hechos sangrientos ni las graves injusticias que se asocian a una campaña de colonización como aquélla.
Claro que hubo violaciones y desafueros, pero no fueron la tónica dominante.
Según la investigación de la historiadora Carmen Martín Rubio, que ultima una nueva biografía de Francisco Pizarro que va a dar mucho que hablar, conviene estudiar sin los prejuicios de la leyenda negra los tempranos amores de los primeros españoles en el Nuevo Mundo, destaca el diario español ABC.

¿Y si la curiosidad y la atracción mutuas entre los exitosos guerreros europeos, venidos de los confines del mundo, y las princesas incas hubieran puesto el ejemplo nada más comenzar la conquista? ¿Fue también una conquista, digamos, galante acorde con ese amor que preconizaban los libros de caballerías de finales del siglo XIV, que aunaban la esencia de los códigos de la Edad Media y el romance renacentista?
Ambas son dudas razonables.
Martín Rubio mantiene que no fue sólo el producto de la sumisión de las mujeres indias, ni de la violación generalizada y el rapto como esclavas y criadas.

"No se trata de negar la historia, sino de conocerla mejor. Los españoles hemos asumido, a menudo sin rechistar, sin sentido crítico, esa visión culpable de un hecho que dio nacimiento a un mundo diferente, más de lo que los conquistadores esperaban. La mayoría de las veces, esta situación fue voluntaria, pues los conquistadores despertaron en ellas una gran curiosidad y, sobre todo, el deseo de conocerlos íntimamente”, escribe la polémica Carmen Martín Rubio.

Una nueva raza

Como base, la historiadora investiga las numerosas relaciones esporádicas que voluntariamente brotaron durante esos años, "de las cuales comenzaron a surgir los mestizos y las mestizas: es decir una nueva raza, o casta, mezcla de la amerindia y de la europea mediterránea”.
Lo más curioso es que el mestizaje ya existía entre los incas.
Según han demostrado los análisis científicos de la momia Juanita de Arequipa -una joven ofrendada hacia 1450 al apu o monte Ampato-, "su padre procedía de Corea y su madre era natural de Puno, ciudad situada al sur del actual Perú. Este dato revela una realidad de la historia de América poco conocida en España, tristemente: la navegación de los pueblos del Pacífico”, añade la historiadora española.

En el Caribe, por otra parte, los caciques entregaban a sus hijas a los capitanes una vez que establecían la paz con los españoles.
De estas uniones surgieron algunas apasionadas historias de amor "como la de Alonso de Ojeda y Guaricha, bautizada Isabel; la de Vasco Núñez de Balboa con Anayansi, hija del cacique de Caretas, y asimismo la relación que Diego de Almagro mantuvo en Panamá con una mujer aborigen, de la que nació su hijo Diego de Almagro el Joven”, sostiene.
Y en Perú también, según reivindica Martín Rubio.
El gran cronista Garcilaso de la Vega Inca era hijo de la princesa Isabel Chimpu Ocllo y del capitán Garcilaso de la Vega, pariente del poeta de igual nombre. O los hijos que los hermanos de Francisco Pizarro, Juan y Gonzalo, tuvieron con señoras pertenecientes a la nobleza inca.

Las princesas incas estaban rodeadas por el lujo y el misterio en aquellos primeros años de conquista española.
"Según relata el cronista Pedro Pizarro, las mujeres que Atahuallpa llevó a Cajamarca cuando fue hecho prisionero eran muy hermosas, tenían los cabellos largos y caídos sobre los hombros; sus túnicas estaban adornadas con piedras preciosas y llevaban los rostros ocultos por preciosas máscaras de oro fundido”.
El inca escogía a las más bellas del imperio. Su alto rango social "constituía un gran atractivo para los conquistadores, máxime al legalizar sus propiedades la Corona española” con el matrimonio mestizo.

Pizarro, encantado
El propio Francisco Pizarro, un hombre tosco, aguerrido e intolerante, "no se libró de caer rendido ante los encantos de dos de aquellas princesas, cuando ya era un hombre de edad avanzada y, aunque no se casó con ellas, las tomó por esposas en los últimos años de su vida”, agrega la historiadora con seguridad.
Desde luego, cualquiera que fuese su intención, en los albores de la sociedad hispánica en América se promovió el mestizaje desde la cúspide social.
No era, únicamente, una cuestión simbólica que reflejaba el encuentro de dos mundos, sino también una herramienta de legitimación de un poder que sin duda estaba en plena transformación. Esa incipiente E spaña provenía de la construcción de un país en procura de una identidad nacional que había derribado ocho siglos de presencia musulmana y tenía el gran reto de abandonar el lastre del Medioevo y trazar el rumbo del Renacimiento europeo.
Por supuesto, la legitimación de un acuerdo entre partes interesadas a través del matrimonio era un modelo para hombres que, en su momento, sirvieron a los Reyes Católicos y a sus hijos, que la habían practicado y lograron que su reino, España, cobrase una nueva dimensión.
Esa conveniencia política se tradujo en una nueva sociedad criolla, mestiza y leal a la Corona.

La azarosa vida del conquistador

La azarosa vida del conquistador
La vida de los conquistadores es pura adrenalina, su sangre y su siglo corren aceleradamente por biografías vertiginosas.
Por ejemplo, Francisco Pizarro viaja a Italia a los 17 años, lucha en los Tercios junto al Gran Capitán y aprende la ciencia militar. Al comenzar el siglo XVI viaja a América.
En 1513 aparece junto con Vasco Núñez de Balboa, descubriendo el Pacífico, en una expedición en la que oye por primera vez a los indígenas hablar del rico reino del Birú.
En 1526 comienza a buscar el mítico imperio y en 1534 toma Cusco, tras una década de sacrificios, horrores y hambrunas, superando indisciplinas y desafíos que, aún hoy recordados, cortan el aliento.
Pizarro gobierna y enriquece a la Corona como pocos, ya que las grandes minas están en sus dominios. La corriente de oro y plata de Perú, Charcas y Potosí, que inunda Europa y funda el capitalismo, mana de su gobierno que, luego, capitalizaría un Estado absolutista empeñado en derrotar allá donde fuere los vientos de la Reforma religiosa, sembrando Europa y el mundo conocido de hogueras y sambenitos, ajustes de cuentas y fundamentalismo católico, no exento de brutalidad y oscurantismo.
Ésa era la mentalidad de los conquistadores, que en principio se negaron a abrazar cualquier atisbo de modernidad renacentista y trasladaron a América las taras del feudalismo medieval, fraccionando la tierra y construyendo una sociedad de amos y siervos que bien se mantendría hasta mediados del siglo XIX.
Según Albert Balcells, historiador y especialista en asuntos relacionados con el periodo de conquista y colonización de A mérica Latina, "evidentemente hay cierto romanticismo heroico en la conquista y en los actores de la gesta hispana, pero la realidad muestra que aquellos que se aventuraron a cruzar el Atlántico, seducidos por la magia de El Dorado, se comportaron como señores feudales que se cobraban el derecho de pernada en los nuevos territorios a modo de prolongación de la España que un día dejaron atrás y que muy pocos volvieron a pisar vestidos con honores y oropel”.

Las cartas de Pizarro revelan otra imagen del conquistador

Francisco Pizarro es tal vez el más controvertido de los conquistadores, según nos cuenta la leyenda negra.
Audaz y determinado en sus hechos de armas, la historia no le perdona que colonizara el imperio de los incas a sangre y fuego, librando cruentas pugnas por el poder con sus subordinados, que también querían una porción de la riqueza descubierta.
Sin embargo, las cartas que escribió en su momento y que de hecho son poco conocidas reflejan una figura mucho más compleja.
Se trata de un estadista con sentimientos y escrúpulos ante las decisiones difíciles que debió afrontar, y también con algunas ideas muy claras que a la larga se convertirían en las virtudes fundacionales del Nuevo Mundo hispano, como la apuesta por el mestizaje, el mandato (tantas veces fracasado) de tratar bien a los indios y la pacificación.
Eso es lo que asegura la historiadora Carmen Martín Rubio, quien publicará una biografía sobre el conquistador, que aparecerá el próximo año y está llamada a cambiar estos prejuicios.
Según sus conclusiones, antes de juzgarle no debemos olvidar que Pizarro viene de una cuna humilde. "Aunque pertenece a una familia aristocrática de Trujillo fue rechazado por su padre. Tal vez ese hecho influye en el afán de superación que gobierna toda su biografía”, comenta la historiadora española.
Pizarro es hijo ilegítimo, se cría con su madre y su abuelo materno, campesinos y roperos. Es un niño que no aprende a leer. Se conserva la partida de bautismo y allí se le consigna como Francisco González, con el apellido de la madre. "No llevará el apellido de su padre hasta los 12 años”, apunta Carmen Martín R ubio.
Ese hecho marcaría definitivamente su vida y oscurecería su carácter.

viernes, 14 de febrero de 2014

Bolivia recuerda hoy 135 de la invasión chilena a Antofagasta

El presidente Evo Morales recordó el viernes los 135 años que se cumplen esta jornada de la invasión chilena al territorio nacional con el apoyo del imperio inglés en 1879 y reiteró que el tribunal de La Haya evidenció un tema pendiente entre Bolivia y Chile, en referencia a la demanda marítima boliviana.

Morales, en la inauguración de una infraestructura educativa en la zona Sur de la Paz dijo que 'hoy es una fecha lamentable para Bolivia, recordar a toda Bolivia un 14 de febrero cuando Bolivia carnavaleaba empieza la invasión de Chile hacia el territorio nacional'.

El Jefe de Estado explicó que entonces empresas transnacionales de Inglaterra financiaron la invasión chilena, que algunos pretenden hacer ver como una guerra, pues la guerra se declaró casi un mes después, pero cuando el territorio nacional ya estaba invadido.

'Empieza la invasión para quitarnos el mar, un asalto e investigadores dicen que hubo guerra no hubo guerra sino invasión militar financiada por entonces el imperio de Inglaterra', mencionó.

El Mandatario reiteró que en los recientes días el Tribunal de La Haya, en el dictamen del fallo en el diferendo marítimo entre Chile y Perú, evidenció la existencia de un tema pendiente de resolución entre Chile y Bolivia.

Así también ratificó que los tratados son modificables, un claro ejemplo que puso fue el conflicto entre Estados Unidos y Panamá, que después de 100 años y una lucha permanente del país panameño se resolvió con la devolución del territorio al país de origen.

'Es una clara muestra que los tratados no son intocables', dijo en referencia al tratado de Paz y Amistad suscrito entre Bolivia y Chile en 1904, el que es incumplido por el gobierno chileno.

En abril de 2013, Bolivia demandó a Chile ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya en busca de un fallo que obligue a Santiago a negociar una salida soberana al Pacífico.

El país perdió 120.000 kilómetros cuadrados de territorio y 400 kilómetros lineales de costa tras la invasión chilena en 1879.

Patricio Lynch, el anglo-chileno que invadió Antofagasta en 1879


En 1879, un 14 de febrero como hoy, el buque “Blanco Encalada” desembarcó tropas chilenas en Antofagasta. Este acto abrió las puertas a la Guerra del Pacífico entre Bolivia y Chile. Abordo de este buque se encontraba el vicealmirante Patricio Lynch, del cual trata este artículo.

Lynch nació en Chile en 1825, en el seno de una familia de origen irlandés, estrechamente ligada al Imperio Británico. La familia Lynch, históricamente, es considerada una familia dedicada a la guerra, tanto así que su apellido da origen a la palabra “linchamiento” y el verbo “linchar”.

Veamos a continuación la carrera militar de Patricio Lynch antes de la Guerra del Pacífico. Lynch comienza su carrera militar muy pequeño. Primero en 1837, Con tan solo 12 años, participó de la Guerra contra la Confederación Perú-Boliviana. En una de estas campañas navales fue participe entre los asaltantes de la corbeta peruana “Socabaya”. Obteniendo la victoria en la guerra contra la Confederación, Lynch se pasó a la escuadra británica.

En 1840, como súbdito de la Reina Victoria, Lynch formó parte de la Royal Navy bajo el grado de teniente de Su Majestad Británica. Participó en la Guerra del Opio, destruyendo al Imperio Chino y ocupando Pekín. Participó en el saqueo de la capital China y, además, se dedico a un negocio para enviar Coolies Chinos al Perú para hacerlos trabajar casi como esclavos. Por su rendimiento en la guerra del Opio, y su fidelidad al Imperio Británico, la Reina le dio un sin fin de distinciones y, el primer ministro Británico Lord Palmerston, lo encomendó volver a Chile. Regresó a Valparaíso el año 1848.

En 1872, una expedición chilena parte a Bolivia, con el objetivo de derrocar al presidente Morales. Esta expedición golpista es disuelta por el Prefecto de Cobija, y la legación chilena se refugia en la corbeta Esmeralda, bajo el mando de Patricio Lynch.

Ahora que conocemos a Patricio Lynch, veamos por qué invadió el Litoral boliviano. Este súbdito de la Reina Victoria invade Antofagasta antes de la Guerra del Pacífico, y también juega un rol importante durante ésta guerra.

La razón por la cual Lynch ancló el Blanco Encalada en el puerto de Antofagasta antes de la guerra era para proteger a la “Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta”, la cual estaba en problemas con el Gobierno boliviano. En Antofagasta, el representante de esta compañía era el británico George Hicks, quien se rehusaba a pagar un impuesto a Bolivia. Hoy en día, sabemos que esta compañía de “sociedad anónima” era más británica que chilena, más del 80% de las acciones pertenecían a un anglo-chileno y a un inglés. Además, el buque blindado Blanco Encalada, construido en Inglaterra, y vendido por Inglaterra a Chile a través de prestamos de la City de Londres son indicaciones que demuestran que la invasión de Antofagasta y la guerra en su totalidad han sido instrumentadas desde Londres.

Durante la guerra, Lynch -en la invasión a Perú- mostró las mismas inclinaciones belicosas con las cuales ganó la admiración de Lord Palmerston. Al igual que en China, donde Lynch ocupó Pekín, en la Guerra del Pacífico ocupó Lima, quedando como autoridad principal de la capital peruana, ganándose el apodo de “Ultimo Virrey del Perú”.

Finalicemos con una frase del primer ministro británico Lord Palmerston (admirador de Lynch), refiriéndose a la eventualidad de una guerra entre Chile, Bolivia y Perú:

“Lo hago bajo mi responsabilidad; y además, Inglaterra es lo suficientemente fuerte como para cagarse en todas las consecuencias”.

Los bolivianos, a 135 años de la invasión de Antofagasta, deberíamos saber la verdad sobre la Guerra del Pacífico: Inglaterra provocó esta guerra, adueñándose de Atacama y Tarapacá, para explotar el salitre y los depósitos minerales. Patricio Lynch es solo un ejemplo de los muchos que demuestran la participación del Imperio Británico en la usurpación del Litoral boliviano.

(Francois Schollaert Paz, historiador)

Alevosa invasión a Antofagasta

La invasión chilena del 14 de febrero de 1879 al puerto boliviano de Antofagasta es el hecho más espeluznante y descarado de la historia de América. Pues, un Estado soberano dispuso el pago ínfimo de 10 centavos de gravamen al quintal de salitre exportado por una empresa anglochilena que gozaba de exportación libre de derechos de toda clase; hecho por el que el Estado chileno se inmiscuyó, sin derecho, en una cuestión interna del otro Estado, usando acorazados y tropa de asalto, con el pretexto de un supuesto incumplimiento del Tratado de 6 de agosto de 1874, aunque no hubo tal.

Si bien el Art. IV de dicho tratado disponía que “los derechos de exportación que se impongan sobre los minerales explotados en la zona de terreno de que hablan los artículos precedentes (paralelos 23 y 24), no excederán la cuota de la que actualmente se cobra, y las industrias y capitales chilenos no quedarán sujetos a más contribuciones, de cualquier clase que sean, que a las que al presente existen”, tenemos que el contrato arreglado entre el Gobierno de Bolivia y la Cía. de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta S.A., en 27 de noviembre de 1873, antes del tratado, en su punto 4º le otorgaba la franquicia de exportar salitre por el puerto de Antofagasta, “libre de todo derecho de exportación y de cualquier otro gravamen municipal o fiscal”, por cuya circunstancia el Gobierno de Bolivia aprobó el texto de este contrato con la condición de que pague 10 centavos por quintal exportado.

Por eso, es falso que Bolivia hubiera incumplido el artículo IV del Tratado, el cual evidencia que a esa fecha existían gravámenes de exportación, empero, estando el contrato con la anglochilena exenta de toda obligación por la exportación de salitre, el Gobierno boliviano no incrementó derecho alguno, sino que sencillamente estableció el gravamen que correspondía, con la mayor legalidad y en ejercicio de soberanía indiscutible.

Véase con que artificio y embuste Chile explotó y embaucó a todo el mundo, con la muletilla de que Bolivia incumplió la cláusula IV del Tratado de 1874, lo que es una verdadera superchería, una falsedad; lo que evidencia también que Bolivia no provocó el “casus belli” para la llamada Guerra del Pacífico, que es una sucesión de invasiones injustificadas, tanto a territorio boliviano como al peruano, empujado por la codicia del Gobierno de aquel país.

Sin embargo, aun en el supuesto de que tal incumplimiento fuera verdadero, ningún país que se respete acude a las armas sin antes agotar la vía del arbitraje a que ambos estados estaban sometidos.

Lo que es inadmisible es que la clase pensante boliviana también se paralogizó con el rebuscado incumplimiento que, repetimos, fue un engaño maquiavélico. De esta forma, con la tergiversación de los hechos, se arrastró a tres países a la guerra más terrible por sus efectos y consecuencias que no terminan aún.

Lo más inadmisible todavía es que, después de tanto descalabro que produjo en Bolivia la guerra sin causa justa, en más de cien años de esta apocalíptica tragedia, no hemos aprendido a aceptar aquella derrota con la altivez y con el alma fortalecida, cuando el descomunal desastre debió enseñarnos a labrar nuestra propia fortaleza y no aceptar nada del atrevido “vencedor”, pero alucinados con continuas tretas nos hemos uncido al carro del usurpador.

El recuerdo de tan aciago atraco debe servir para reflexionar con dignidad acerca del más abominable y desgraciado acontecimiento que le cupo confrontar a Bolivia.

Los agresores lo han justificado en el supuesto incumplimiento del artículo IV del Tratado de 6 de agosto de 1874, argumento que fue manejado hábilmente por el Gobierno chileno como pretexto para consumar su plan de apropiarse de los ricos territorios bolivianos que a la sazón estaba explotando una compañía anglochilena después de haber obtenido graciosas concesiones en la época de Mariano Melgarejo.

Pero con este argumento falaz de incumplimiento, la Cancillería chilena elucubró la tesis embustera de la resolución del Tratado de 1874 que no cabía e inventó la reivindicación del territorio entre los paralelos 23 y 24, con la cantaleta de que fue entregado a Bolivia, con la condición de no incrementar impuestos a los chilenos, lo que es más falso todavía; porque es bien sabido que fue Bolivia quien renunció a territorios hasta el Paposo. El Gobierno de Chile manejó todas estas argucias astutamente, con el pecado de los bolivianos que con tales embustes se dejaron arrollar, sin oponer nunca la resistencia de la verdad.

La otra disculpa está en que la población mayoritaria de Antofagasta era chilena, realidad que obligaba a respetar la hospitalidad que recibía del país anfitrión que les dio trabajo, sustento y riqueza que no tenían en su Patria. No se puede asestar el cuchillo asesino a quien le da acogida.

Otro argumento manejado hasta la exageración es que Chile en el inicio de la guerra carecía de fuerza armada, lo que también es mentira. El asalto se produjo con fuerzas veteranas que hicieron la guerra de genocidio a los mapuches del sur. Allí combatieron y se foguearon los Saavedra, Ramírez, Lagos, Gorostiaga y otros que se ensañaron con los perubolivianos en la llamada Guerra del Pacífico. ¿Y los dos acorazados con que realizaron el asalto no son parte de una preparación antelada?

Concluimos con lo que ya dijimos: El recuerdo de tan aciago atropello debe servir para reflexionar con dignidad acerca del más abominable y desgraciado acontecimiento que le cupo confrontar a Bolivia con tanta impunidad. (Rodolfo Becerra de la Roca)

Tacna a La Paz: Recorrido titánico de Gregorio Collque

Chasqui, mensajero, postillón, estafeta, ‘El Goyo’, son los distintos denominativos que se ha dado al personaje que, tras la ocupación de Antofagasta el 14 de febrero de 1879, tuvo la importante misión de trasladarse a la ciudad de La Paz para informar de lo acontecido al presidente Hilarión Daza. Para esa época el territorio boliviano contaba con escasas rutas, caminos de herradura y un incipiente telégrafo en la costa; sin embargo, estos sistemas de comunicación tenían la terrible desventaja del tiempo. El mapa de Bolivia de 1859 permite observar rutas zigzagueantes, surcadas por caminos de herradura, que encuentran su complejidad por la abrupta característica de los distintos terrenos. A todo lo señalado se suma el tiempo que implicaba el trasladarse de una región a otra.

Frente a la realidad de la invasión chilena y las limitadas condiciones en los sistemas comunicativos se empleó la tradición prehispánica del correo andino: “El Chasqui”. A pesar de los cambios estructurales producto del período colonial y republicano esta tradición continuó, ya que para fines del siglo XIX fue sino la única, la mejor alternativa para informar al presidente Daza lo acontecido en el puerto de Antofagasta.

No se tienen datos personales del indígena Gregorio Collque, no se tiene conocimiento de su lugar de origen y año de nacimiento, lo cierto es que este personaje debió poseer las condiciones físicas y el conocimiento necesario de la topografía de la región, rutas de conexión y atajos, para que se le hubiera encomendado la tarea de trasladarse hasta la ciudad de La Paz, recorriendo alrededor de 76 leguas en seis días, desplazándose por desiertos, llanuras, cerros, cordilleras nevadas, quebradas y ríos con la única y sagrada misión de llegar a la brevedad posible a la Paz, para informar al presidente Daza de la invasión del Litoral boliviano.

Este mensajero recorrió senderos que en parte fueron propios del “Qapac Ñan” o Camino real (de gran importancia para el gobierno incaico en su labor de controlar el vasto territorio del Tawantinsuyu). Collque se trasladó utilizando los medios existentes en cada lugar, en su titánico recorrido a pie para llegar lo antes posible a La Paz.

Tres días después, el miércoles 19 de febrero, en Arica se encontraron el coronel Zapata y el cónsul boliviano Manuel Granier, quien desde Tacna se trasladó a este puerto para confirmar la noticia que llegó por telégrafo, mensaje enviado desde Iquique, que daba cuenta de la invasión.

Granier enterado de la situación redactó una correspondencia urgente para el Gobierno con la intención de que ésta llegue lo antes posible a La Paz. Es en estas circunstancias, evaluando la manera más rápida de informar al Gobierno, se decidió encomendar esta tarea al Chasqui indígena Gregorio Collque, quien partió rumbo a la ciudad de La Paz a primeras horas del día jueves 20 de febrero.

Desde Tacna se trasladó hasta Palca recorriendo 11 leguas. Geográficamente la región presenta deformaciones y poca vegetación. El día viernes 21 se desplazó de Palca a la posta de Uchusuma recorriendo 14 leguas. No conocemos las vicisitudes que tuvo que pasar ya que en la frígida región existen cerros puntiagudos, ríos, cordillera nevada sin vegetación ni valles, es lo más alto.

El sábado 22 se trasladó de Uchusuma a Chulluncayani (provincia Ingavi del departamento de La Paz) recorriendo 14 leguas. La región se caracteriza por quebradas, valles, ríos, riachuelos y terrenos en descenso. El domingo 23 (fecha en la que se iniciaban los festejos del carnaval) se trasladó de Chulluncayani al pueblo de San Andrés de Machaca, recorriendo 13 leguas por un terreno con quebrada, ríos y pampa. El lunes 24 partió de San Andrés de Machaca a Tambillo, recorriendo 14 leguas desplazándose por un terreno plano y regular con pocas deformaciones. El martes 25 partió desde Tambillo a la ciudad de La Paz recorriendo 10 leguas por terreno irregular llegando al Palacio de Gobierno pasada las once de la noche.

Al no hallar al presidente Daza en Palacio se dirigió a la casa del coronel José María Valdivia, quien era Intendente de Policía, allí entregó la correspondencia dirigida a Daza. El Presidente informado de lo acontecido se dirigió de inmediato a Palacio de Gobierno. Al parecer:

“Los invitados, ante la extraña conducta del Presidente y edecanes que salían apresuradamente de la casa, rodearon a Colque, que había quedado en la casa, interrogándole sobre lo ocurrido. Les comunicó cuánto sabía sobre el asalto del puerto de Antofagasta”.

El miércoles 26, el Presidente y sus colaboradores directos tomaron distintas medidas de emergencia nacional para hacer frente a la invasión chilena. El jueves 27, desde el púlpito de la Iglesia de San Francisco se dio a conocer la noticia de la invasión, que terminó en una multitudinaria manifestación que culminó en la plaza de Armas. El viernes 28 se publicó en el periódico “El Comercio” sobre los sucesos de Antofagasta dando a conocer las primeras medidas, entre estas se declaró la ley de amnistía amplia y generosa para todos los perseguidos y detenidos políticos, se declaró a la Patria en peligro por lo que se llamó a la unidad y a la pronta acción.

Queda decir, en palabras de Don Gastón Velasco, que: “El (…) estafeta Gregorio Collque, más comúnmente conocido como ‘el Goyo’ fue el héroe sufrido de esta titánica jornada de vencer 74 leguas en seis días, cruzando desiertos, precipicios, cumbres cordilleranas, la soledad matadora de la altiplanicie, sin un descanso, sino el preciso de acampar solitario”.

(Verónica Salomé Colque Jiménez, estudiante de la carrera de Historia de la UMSA)

Tratado de 1904, acuerdo incumplido por Chile

En virtud del Tratado de 1904, Bolivia se vio obligada a ceder su Litoral a perpetuidad a Chile a cambio de compensaciones que este país debía cumplir. Estas compensaciones no han sido respetadas por el Gobierno chileno principalmente en los siguientes aspectos:

El reconocimiento chileno a favor de Bolivia “y a perpetuidad del más amplio y libre derecho de tránsito comercial por su territorio y puertos del Pacífico”.

El Gobierno de Chile menciona en innumerables foros los beneficios del régimen de libre tránsito otorgado a favor de Bolivia. Sin embargo, olvida mencionar que, a pesar de que el Perú tiene una larga faja costera, Chile le ha concedido una serie de facilidades de tránsito en Arica, que Bolivia, un país mediterráneo, no posee.

En efecto, en virtud del Acta de Ejecución de 1999, Chile le otorgó al Perú, el otro país involucrado en la Guerra del Pacífico, tres facilidades con las que Bolivia no cuenta una agencia aduanera, un muelle de ataque y una estación terminal para el ferrocarril.

Por otra parte, cabe destacar que las exportaciones bolivianas asumen un costo por pasar la frontera, la circulación de dichas mercaderías por puertos chilenos no es gratuita y las disposiciones del Tratado de 1904 y de otros acuerdos complementarios son incumplidas permanentemente por razones administrativas, sanitarias, de seguridad y otras motivando constantes quejas por parte de os usuarios bolivianos en los puertos.

Autoridades e instituciones chilenas hacen cobros excesivos e injustificados a los transportistas bolivianos. Asimismo, se realizan cobros arbitrarios por el servicio de transferencia de contenedores en tránsito y por el traslado (devolución) de contenedores vacíos desde el puerto hasta los depósitos navieros.

Asimismo, el tránsito de las mercaderías desde y hacia Bolivia por territorio chileno no siempre ha sido “amplio y libre”. Al contrario, se sabe de numerosos casos en que las autoridades chilenas han restringido o impedido este derecho. El caso que afectó más a los intereses de Bolivia se produjo durante la Guerra del Chaco, cuando las autoridades chilenas impidieron el tránsito de cargas destinadas a Bolivia, cometiendo una infracción al Tratado de 1904 y a la Convención de Tráfico Comercial del 6 de agosto de 1912.

En forma similar, las autoridades chilenas, mediante actos administrativos unilaterales, inmovilizaron los embarques de minerales a los mercados mundiales como consecuencia de la nacionalización de las minas decretada por Bolivia el 31 de octubre de 1952. Además, en ocasiones, el tránsito de la carga boliviana se ha visto afectada como consecuencia de disturbios laborales en Chile, por ejemplo, huelgas o paros de protesta en el gremio de los trabajadores portuarios en Arica o Antofagasta.

Los derechos bolivianos de libre tránsito son, a la vez, obligaciones internacionales del Estado de Chile, de tipo intuitu personae, por lo que no pueden ser transferidas a un agente privado. Se trata de responsabilidades intrínsecas del Estado chileno. Desde la perspectiva del derecho internacional, las empresas privadas concesionarias no pueden ser sucesoras de las obligaciones que la República de Chile tiene con el Estado boliviano.

Además, en el caso de la privatización del puerto de Antofagasta se han incrementado sensiblemente los costos de las exportaciones de minerales, aspecto que ha incidido notoriamente en la competitividad de este sector productivo. La próxima licitación del puerto de Arica preocupa aún más, porque al licitarse todos los sitios de atraque se estaría estableciendo un monopolio, que seguramente incrementará el costo de los servicios que se prestan en este puerto, en el que la carga boliviana representa el 80% del total de la carga movilizada.

El Tratado de 1904 establece que “La República de Bolivia tendrá el derecho de construir agencias aduaneras en los puertos que designe para su comercio. Por ahora señala por tales puertos habilitados para su comercio los de Antofagasta y Arica”.

En aplicación de estas disposiciones y bajo el marco del Sistema Integrado de Tránsito, en los puertos de Antofagasta y Arica funciona una agencia aduanera boliviana, representada por la Administración de Servicios Portuarios – Bolivia (ASP-B), que se encarga de supervisar la operación y almacenaje de la carga boliviana en tránsito, así como de controlar el transporte de mercadería con destino a Bolivia proveniente de ultramar. La privatización de los puertos limita también la presencia de ASP-B y el control que ésta ejerce sobre la carga boliviana en virtud de los acuerdos vigentes.

Asimismo, cabe destacar que aunque el Tratado de 1904 establece a favor de Bolivia el más amplio y libre derecho de tránsito por el territorio y puertos del Pacífico chilenos, las autoridades de este país se han mostrado reacias y han dilatado el tratamiento de las solicitudes de Bolivia para habilitar nuevos puertos para su comercio exterior además de los de Antofagasta y Arica.

Ambos países reconocerían y respetarían los derechos de los ciudadanos “nacionales y extranjeros que hubiesen sido legalmente adquiridos en los territorios que, en virtud de este Tratado quedan bajo la soberanía de uno u otro país”.

El Art. 2º del Tratado de 1904 protegía a aquellos ciudadanos bolivianos que tenían propiedades en los territorios que, en virtud de este tratado, quedaron bajo la jurisdicción de Chile. Infringiendo este Art. 2º, las autoridades chilenas dictaron una ley que obligaba a los ciudadanos bolivianos “a presentarse ante las autoridades a defender sus derechos por el término de cuatro meses desde la vigencia de esa ley”. La propia Corte Suprema de Chile, violando los derechos de los propietarios bolivianos de las Salitreras del toco, falló incumpliendo lo estipulado en el Tratado de 1904.

martes, 11 de febrero de 2014

Antofagasta tomada por tropas chilenas

El 14 de febrero es día de luto para la Patria agraviada, despojada y mutilada, la injusticia perdura, más por la soberbia y codicia de un invasor con afanes siempre expansionistas. Estalló el conflicto bélico bajo el pretexto un año antes, por el gravamen de diez centavos por quintal de salitre explotado en el Litoral, que con todo derecho y legitimidad impuso Bolivia.

El 14 de febrero de 1879, con la toma de Antofagasta - que en ese tiempo era una ciudad boliviana-, por el ejército chileno, se inició la Guerra del Pacífico (1879-1883). Este conflicto bélico, que enfrentó a Chile con Perú y Bolivia, se debió a problemas territoriales y al interés por controlar la producción del salitre - nitrato usado como fertilizante y para la fabricación de pólvora-, que era muy buen negocio en esa época.

El 26 de diciembre de 1878, fondea en las playas del puerto de Antofagasta el buque blindado “Blanco Encalada” en actitud hostil; mostrando su poderío para la guerra que se venía. Mientras tanto, nuestro Gobierno sin tomar previsión alguna atendía las luchas y componendas políticas internas, fratricidas.

Al amanecer del 14 de febrero, una terrible detonación estremeció el aire, luego hubo otros cañonazos. Se presentaron tres buques de guerra con tropas pertrechadas, rodearon desde el mar a la ciudad y puerto de Antofagasta. El coronel Severino Zapata, Prefecto del departa-mento recibe de manos del jefe de la expedición chilena Coronel Emilio Sotomayor el siguiente comunicado: “Antofagasta, febrero 14 de 1879. Señor Prefecto: El Gobierno de Chile considerando roto el Tratado de 1874, me ordena tomar posesión, con la fuerza de mi mando, del territorio comprendido en el grado 23. A fin de evitar todo accidente desgraciado, espero que usted tomará todas las medidas necesarias, como asimismo sus connacionales. Emilio Sotomayor, Comandante de las fuerzas expedicionarias de Chile”.

El Prefecto boliviano res-pondió: “Mandado por mi Gobierno a ocupar la Prefectura del Departamento, sólo podré salir de él por la fuerza. Puede usted emplear ésta, que encontrará ciudadanos desarmados, pero dispues-tos al sacrificio y al martirio. No hay fuerzas con qué contrarrestar a los tres vapores blindados chilenos, pero no abandonaremos este puerto, sino cuando se consume la invasión armada. Severino Zapata, Prefecto del Depar-tamento de Cobija”.

La ocupación de Antofa-gasta se consuma, se vienen días de angustia, dolor y luto para nuestro país.

14 de febrero de 1879

No hay fecha tan hiriente para los bolivianos, como el 14 de febrero de 1879, porque representa una herida abierta que todavía no cicatriza, un dolor que después de haber transcurrido 135 años lo siente todo un pueblo, al en-carnar la injusta e indigna invasión militar chilena al puerto boliviano de Antofagasta, que dio inició a la denominada Guerra del Pacífico, que ocasionó la pérdida del litoral boliviano.

Sin embargo, la historiografía actual, que estudia la citada guerra, describe muy poco sobre la posición de la diplomacia Boliviana de este período histórico. En ese sentido, en esta nota describiremos la manifestación de nuestra diplomacia a través de la correspondencia enviada por el entonces Ministro de Relaciones Exteriores de Bolivia, Eulogio D. Medina a su similar de la República del Perú, Manuel Irigoyen. La citada correspondencia fue fechada el 31 de marzo de 1879 y fue redactado en La Paz, posteriormente fue publicada por la Cancillería Peruana en la memoria institucional de la época, quizá es la primera nota oficial que describe la posición de la diplomacia Boliviana.

Es interesante señalar, que en la nota desde un inicio subraya, de que Chile: “ocupó a mano armada la parte del litoral boliviano…haciendo presa de las importantes poblaciones de Antofagasta, Mejillones y Caracoles, tres fuentes de riqueza por sus productos naturales de salitres, huano, metales de plata y de cobre y otras muchas sustancias”. Además, resalta que: “aquel acto atentatorio y altamente depresivo de la soberanía e independencia de Bolivia, de su derecho y dignidad ha sido reagravado…con la ocupación de los puertos de Cobija y Tocopilla, que se ha verificado en los días 21 y 22 de marzo (de 1879, J. P.)”.

Para precisar la situación, el diplomático boliviano señala sobre la invasión: “lo encubierto del pensamiento lento y tranquilamente preconcebido, desde tiempo atrás, son circunstancias que afectan la honorabilidad del gobierno de Chile y que dan su verdadero carácter y colorido al crimen consumado contra Bolivia y contra el derecho público de las naciones”.

En un esfuerzo de síntesis valioso el diplomático boliviano, repasó a través de su ágil pluma, la titularidad de Bolivia: “que bajo el nombre de el Alto Perú, fue la sección americana, que luchó por mas largo tiempo para conquistar su emancipación, proclamó su independencia y autono-mía en 1825, bajo los límites de las anti- guas provincias, que debían constituir la… fue en 1842, con motivo de los descu-brimientos de huano de Mejillones, que Chile mani-festó sus prime-ras e infun-dadas pretensiones al territorio com-prendido entre los para-lelos 23 y 24 de latitud austral”. También describe sobre las gestiones diplomáticas enviadas a Santiago por Bolivia, para solu-cionar el problema limítrofe: “los trabajos é instancias de seis distintas legaciones constituidas en diferentes épocas, no fue-ron bastantes para sacar á aquel gobierno del medio calculado de aplazamiento y moratorias…consecuencia natural y preci-sa de semejante conducta, ha sido el siste-ma chileno de ocupar á mano armada ad perpetuam, en la ocasión mas favorable el territorio codiciado”.

Evidentemente la nación de Chile utilizó como pretexto la Ley boliviana dictada el 14 de febrero de 1878, para invadir. Esta Ley imponía el pago de 10 centavos sobre el quintal de salitre exportado por una so-ciedad anónima, denominada “Compañía Anónima de salitres y de ferrocarril de Antofagasta”, empresa a la cual el gobier-no de Bolivia había concedido la explota-ción de un vasto terreno salitrero. Es nece-sario mencionar, que la medida tomada por el gobierno boliviano, fue una cuestión to-talmente privada, que no vulneraba los derechos de Chile, ni afectaba su política internacional. Por otro lado, la compañía alego nacionalidad chilena y residencia en Valparaíso.

Sin embargo, el diplomático boliviano también señaló que el representante chileno en Bolivia, el Sr. Videla, Encargado de Negocios a. i., distrajo la atención del entonces gobierno de nuestro país, con el discurso de mediar entre ambos países el conflicto por intermedio de amistosas negociaciones diplomáticas. Sin duda, la agresión de Chile en pleno estado de paz, sin previa declaración de guerra y pendientes las negociones ofrecidas tomaron completamente desprevenido a Bolivia.

En términos diplomáticos sobre la inva-sión al litoral boliviano, el canciller Medina, menciona: “ha sido juzgado ya por la opinión pública de América, como un acto atentatorio e injustificable” y que la nación de Chile, “ha alegado razón justificativa ninguna, que autorice la guerra ofensiva que ha promovido a Bolivia”.

De esta manera, mediante esta nota, presentamos segmentos de un documento que demuestra el punto de vista de la diplomacia boliviana, sobre la dolorosa invasión chilena al puerto boliviano de Antofagasta.

Venganza de indígenas contra Oruro costó 300 muertos

Después de la revolución del 10 de febrero de 1781, miles de indígenas se quedaron en la ciudad, saquearon casas, reclamaron alimentos y, al final, se rompió el pacto entre "criollos" orureños y los indígenas, y éstos decidieron tomar venganza, días después.

El 9 de marzo, al amanecer, ingresaron a la ciudad de Oruro, los indígenas de Sillota, Paria y otras comunidades, "se fueron derecho a la casa del corregidor Jacinto Rodríguez, demandando su cabeza, por traidor, no sin amenazar a todo el vecindario", según el historiador Ángel Torres, en su libro Oruro en su historia.

Rodríguez, que había reorganizado la seguridad, después de derribar los escudos e insignias de los españoles, el 10 de febrero de 1781, hizo rechazar a los miles de indígenas, porque los habitantes de la Villa de San Felipe de Austria ya estaban cansados de tantos problemas.

"Se tocó a rebato, la gente se munió de armas que pudo y dio batalla a los invasores, hasta expulsarlos, causándoles 300 bajas", explica Torres.

La lucha fue desigual, porque en Oruro se logró recuperar armas de fuego y hierro, mientras que los indígenas tenían solamente hondas y macanas. La Villa estaba indefensa y desde entonces se reorganizaron las milicias.

Sin embargo, los indígenas cambiaron de estrategia, ya no querían el combate frontal, sino el cerco a la ciudad, impidiendo el paso de los alimentos por los diferentes caminos.

Los habitantes de Oruro tenían hambre y, las tropas se organizaron para "quebrar los frentes enemigos". Una comisión logró romper el cerco y traer alimentos desde Paria, en medio de una confrontación bélica.

El 18 de marzo de 1781, la situación empeoró. Habían más indígenas, que llegaron de Carangas, Pacajes y otros pueblos, en diferentes cerros de la ciudad. También estaban de Poopó, Sora Sora y Antequera.

"El combate fue desfavorable a los sitiadores, tuvieron varios muertos, entre ellos un capitán, cuya cabeza fue llevada a la Villa para su exhibición, macabro hecho que elevó la moral de los defensores, pero se carecía de mandos y pertrechos", explicó Torres.

Ante esa situación, la población orureña dispuso el indulto de los españoles que salieron de sus escondites, después de más de un mes de la revolución del 10 de febrero. Los españoles reforzaron las milicias y se decidió atacar a los indígenas en el cerro de San Pedro, provocando la muerte de 190 sitiadores, se capturó a 18, logrando el retiro de las tropas indígenas, pero en Oruro permanecía el hambre, aunque se logró restituir la seguridad y la tranquilidad.

DATOS

El 9 de marzo hubo una invasión de comunarios de Sillota, Paria, para exigir la cabeza del líder de la revolución, Jacinto Rodríguez

Los orureños, que no eran más de 5.000 personas, repelieron la actitud.

lunes, 10 de febrero de 2014

Oruro La decadencia de la minería y la Revolución de 1781

De acuerdo a datos históricos extraídos del libro Oruro 1781: Sublevación de indios y Rebelión Criolla de Fernando Cajías de la Vega, la decadencia de la minería fue uno de los principales factores para la Revolución de 1781.

Oruro desde tiempos remotos fue eminentemente minero, es así que su fundación se debe a la existencia de ricos yacimientos mineros que hasta la fecha perduran en el tiempo.

Cuando se fundó la Villa San Felipe de Austria, fue un asiento minero con similar opulencia y población que la Villa Imperial de Potosí; sin embargo a lo largo de los años los buenos tiempos de la minería fueron en descenso, los periodos más críticos de esta actividad económica se registraron antes y después de la revolución del 10 de Febrero de 1781.

Cajías escribe que la minería inició un proceso de decadencia antes de la sublevación, pero después pasó por momentos aún más difíciles, pues tuvo una crisis mucho más profunda, ya que la revolución orilló el encarcelamiento de mineros y azogueros criollos, por lo cual sus minas, ingenios y trapiches fueron embargados a depositarios y arrendatarios, quienes no tuvieron interés en seguir produciendo.

Señala que existieron testimonios de personas que indicaron que una de las causas para que se dé la Revolución del 10 de Febrero de 1781, fue la crisis en la minería de Oruro y la desesperación de quienes eran los grandes mineros de aquella época.

A finales del siglo XVII se comenzó a sentir la baja en la minería, lo cual siguió hasta 1740, se vivieron empobrecimiento y el despoblamiento de la Villa; pero gracias al surgiendo de nuevas minas de plata en Poopó, se fue recuperando la actividad, logrando un nuevo ciclo de auge, lamentablemente por la falta de apoyo a la minería esto no duró por mucho tiempo.

Se dice que la decadencia de la minería fue provocada por varios factores entre ellos la falta de apoyo a las políticas mineras y el apoyo técnico, a lo que se sumaba el trabajo desordenado que se ejercía y sin seguridad para los obreros indios.

La quiebra de algunos de los principales mineros criollos, la falta de liquidez para adquirir azogue y pagar los impuestos al fisco, llevó a buscar créditos de los comerciantes, que eran europeos en su mayoría. Por ejemplo, el otrora acreedor Diego Flores estaba endeudado al comerciante europeo Josep Ruiz Sorzano. Jacinto Rodríguez trabajaba en una mina que no rendía mucho y se vio obligado a depender de su hermano Juan de Dios; Manuel Herrera pasaba por grandes dificultades para trabajar su ingenio.

A causa de estos acontecimientos se generó la sublevación del 10 de Febrero de 1781, llegando a consolidarse una enemistad entre mineros criollos y comerciantes europeos.

Los préstamos para adquirir azogue no sólo distanciaron a criollos y europeos; también originaron conflictos entre criollos entre grandes y pequeños mineros. Tal es el caso de la contienda entre Clemente Menacho y su cuñado Diego Quiroz, riña que los llevó a declarar el uno contra el otro en el proceso posteriormente seguido a los principales de Oruro.

Después de la revolución de 1781 la crisis económica continuó, pues no se tenía mano indígena, se carecía de alimentos, escasez de azogue y paralización casi total de las labores de minas e ingenio tanto en Oruro como en Paria.

Finalmente la minería en los años posteriores fue estabilizándose y hasta la actualidad es una de las principales actividades que genera recursos económicos a favor de la región y del país.

Analistas critican la faltan de inversión en proyectos de exploración y prospección minera, pues a la fecha se continúa trabajando con los mismos yacimientos mineros de hace años.

Sebastián Pagador: de pagador a héroe?

"Pagador, el Titán de los Andes", canta la estrofa del Himno a Oruro. "Héroe que murió abrazado y defendiendo las Arcas Reales. Surge la pregunta. ¿Héroe para quién fue? ¿Para los realistas de la época?

Cuando suceden los movimientos libertarios de 1780 protagonizados por los indígenas, Sebastián "Pagador" era completamente desconocido ya que muere a consecuencia de la convulsión de los pueblos indígenas de Paria, Sora, Caracollo y Challapata que se rebelaron ante el abuso y explotación del sistema colonial donde los criollos formaban parte del sistema.

La historia de los levantamientos y las rebeliones de Oruro, está llena de dudas, muchos atribuyen el encabezamiento de éstos a Sebastián Pagador, Jacinto Rodríguez, entre otros. Sin embargo algunos remontan los primeros gritos libertarios de Oruro a los años 1739 donde ciertos conjurados como Belez de Córdova, Eugenio Pachacmina, y otros, fueron delatados por Bernardo Ojeda y castigados por el corregidor Martín Espeleta y Villanueva a la pena de garrote y suplicio. Luego se menciona que surgieron los criollos de Chuquisaca y La Paz que lanzan el primer grito de la Independencia Americana de 1809. Se sabe que los criollos solo buscaban detentar el poder y privilegios de los españoles sobre la población indígena y no buscaban ninguna liberación para los pueblos oprimidos por el yugo español.

Creemos que la verdadera historia de Oruro aún todavía no está escrita. Es necesario reconocer que existe un manto de dudas sobre el proceso histórico real de Oruro. Por ejemplo un escritor decía: "Carecemos en absoluto de datos fijos sobre las circunstancias precedentes al descubrimiento de los yacimientos argentíferos de Oruro." (Ascarrunz, 1926). Es posible que se remontan a la época incaica como afirmara el Dr. Adolfo Mier. Recordemos que la historia se emplea en tres sentidos: en el de los hechos acontecidos, en el de la noticia de estos hechos y en el de la ciencia de lo acontecido.

Sin embargo se afirma que "los vencedores son siempre los que escriben la historia", no importa cómo. Ojalá esta vez la nueva generación del nuevo Estado plurinacional, sean los vencedores de la ignorancia, la mediocridad, el racismo y la discriminación absurda de la que sigue padeciendo la sociedad boliviana. Ya algunos escritores conscientes de la realidad del país decían que "todo parece generado por una extraña demencia y una estupidez burlesca premeditada. La historia de Bolivia está llena de presidentes benévolos que hubieran ofrendado su vida y su fortuna, sin embargo la misma es todo lo contrario. Con tal modalidad "historicista", se ha falseado la verdadera historia de Bolivia, presentándonos una imagen distorsionada con arreglos a los intereses de las clases dominantes". En el siglo pasado, la educación en Bolivia fue un privilegio de los hacendados y oligarcas. Los falsos héroes aparecen por doquier en la literatura oficial.

Así encontramos, la historia de nuestro país, sembrada de héroes falsos, como: Pedro D. Murillo que fue colgado por la corona española para escarmiento de los criollos que reclamaban los mismos derechos de explotación sobre los "indios" y su intención era proclamarse Virrey del Alto Perú. Eduardo Avaroa, murió por defender su hacienda y sus propiedades. Alguien le inventó la frase "Que se rinda su abuela, c…" La historia recuerda a Avaroa con intereses económicos y mucha inclinación sobre Chile.

Y en Oruro, tenemos a Sebastián Pagador, del que le inventaron el apellido y su rango de sargento. De este señor solo se conoce su nombre llamado Sebastián y su cargo "pagador", este cargo ocupaba como empleado del criollo y acaudalado minero Jacinto Rodríguez, quien además de tener el cargo de Alcalde y Justicia Mayor aparece en la historia por sus desavenencias entre los españoles y criollos provocadas por pugnas de poder ya que en reemplazo a su cargo los españoles nombraron un Corregidor quitándole sus privilegios.

Para la época, el malestar político entre criollos y españoles era por demás evidente debido a la caída y depresión económica en la cual vivían y presionaban a la población indígena a prestar trabajos gratuitos, en las minas y sus ingenios a cambio de nada. La riqueza de los mineros se debía al trabajo gratuito de los indios. Así el autor Genaro Ascarrunz relataba en su libro Compendio de la Historia de Oruro. "Los vejámenes diarios inferidos a la raza autóctona; las expoliaciones contra ella cometidas por los curas de insaciable avaricia y los corregidores, las injusticias…rebasaron los límites del sufrimiento llevándoles a la exacerbación."

A Sebastián el pagador, le encontraron muerto abrazado de un baúl de monedas correspondiente a las Arcas Reales, producto de la rebelión indígena que ocupó por muchos días, "se habían levantado los indios de Challapata, los de Paria, y los de Caracollo, quienes exigían la abolición de las "encomiendas" o haciendas que habían en esas zonas, la supresión de los "repartos" de mercancías de los corregidores, la abolición total del servicio de la mita y la rebaja de las contribuciones indígenas a la Corona." (Valencia Vega, 1990)

Nada más absurdo la historia de héroes que hasta ahora nos han contado y que lamentablemente nuestros educadores continúan repitiendo y enseñando en las aulas apaciblemente una historia falsa de nuestra nación sin preguntarse cómo y dónde aparecen los héroes de la literatura nacional.



Bibliografía

Ascarrunz, J. (1926). Historia de Oruro. Oruro: Publicación Prefectural.

Bautista S., J. J. (2010). Crítica de la Razón Boliviana. La Paz: Ediciones Rincón.

De Mesa Gisbert, J. y. (2003). Historia de Bolivia. La Paz: Editorial Gisbert.

Valencia Vega, A. (1990). Sebastián Pagador. La Paz: Juventud.

María Quiroz fue apresada por vestirse de indígena

María Quiroz, esposa del Capitán Clemente Menacho, quien fue parte activa de la insurrección, fue la primera mujer que luego de la revolución del 10 de Febrero salió a las calles ataviada con el multicolor atuendo nativo, con el fin de que las demás mujeres la imitaran y como símbolo de alianza con los

indígenas.

Esta ilustre mujer nació el año 1746 en la localidad de Arque, que por entonces pertenecía al departamento de Oruro, años más tarde se distinguió como una dama elegante, hermosa y fina, figurando entre lo más destacado de la sociedad orureña. Al parecer era analfabeta, pues no sabía firmar.

Luego de la rebelión del 10 de Febrero, cuando criollos y pueblo orureño se levantaron, ingresó a la Villa de San Felipe de Austria, hoy Oruro, un contingente de indios del Partido de Sepulturas, sin embargo, poco a poco iban llegando más naturales de otras comarcas, habiendo sobrepasado el número de habitantes locales que era de cinco mil.

Es así que surgió la voz de que todos: hombres, mujeres y niños debían vestir como nativos. Se vio a las damas criollas llevando difícilmente ajsus, almillas y pantas, mientras que otras se vistieron con las polleras acampanadas de las cholas.

Esto se realizó como símbolo de alianza, de clases, no vestirse con ropa indígena, daba lugar a que fueran considerados enemigos y de inmediato pasados a degüello.

Al respecto Quiroz en el expediente 1410 confesó: "Salieron, voces para que hombres y mujeres se vistieran de indios y salieran a hacer bulto".

En medio de aquel abigarrado conjunto multicolor de criollos, mestizos, mulatos e indios de ambos sexos, igualados todos por el vestido tradicional indígena que llevaban con muestras de especial orgullo, pugnaban por demostrar el odio y la guerra contra todo lo que constituía costumbres españolas.

Creían cumplir mejor trajeándose así y mascando coca, con el programa y fines del caudillo indio.

Aquellos rostros de hombres y mujeres, bravos resueltos y firmes, con este gesto retrógrado, sancionaban la partida que la juzgaban definitivamente ganada.

Entre España y ellos querían poner profunda

separación y un positivo acercamiento al pasado

incásico.

La corona española, Carlos III, fue el que ordenó el procesamiento de los motores y cabecillas del alzamiento del 10 de febrero de 1781.

El esposo de María Quiroz, capitán Menacho fue apresado y llevado a Potosí, allí fue interrogado, y por ser altivo en sus respuestas fue sometido a cruel tortura, habiéndole dado 100 azotes y se le arrancó las uñas de las manos, dejándolo con la salud quebrada, para luego trasladarlo hasta Buenos Aires.

En una segunda batida, se apresó a María Quiroz que fue acusaba de haber vestido de india e inducido a que otras hicieran igual; en un segundo grupo junto a otras mujeres y también varones, se la trasladó a la capital del Virreinato, montados en mulas, fuertemente asegurados contra cualquier intento de fuga.

Fueron encarcelados y sometidos a las más inhumanas condiciones de existencia. Engrilletados noche y día, sin agua, para la higiene, pésimamente alimentados, enfermos, privados de toda asistencia, algunos hasta perder la razón.

Lo peor era que no había juicio, no se les recibía declaraciones.

El 18 de junio de 1787 se sobreseyó las causas a favor de María Quiroz, fallecida, penosamente antes de esta decisión.

Mientras que su esposo, capitán Clemente José Menacho, fue hallado culpable de motor y caudillo principal, inductor del levantamiento de su compañía, conductor de los tumultuados, la muerte de hispanos, y robo de sus bienes, por lo que fue condenado a la muerte por ahorcamiento, arrastrado y descuartizado, más infamia perpetua de su nombre.



COLEGIO

Por el significado que tiene para los orureños, y sobre todo para las orureñas, la valentía de esta mujer es que se fundó una escuela que lleva su nombre, y que hoy tiene ya tiene 91 años de vida institucional y al servicio de la educación de las niñas.

Fue el rector de la universidad "San Agustín" hoy Universidad Técnica de Oruro (UTO), Benjamín Guzmán quien fundó el 3 de febrero esta unidad educativa, que fue inaugurada oficialmente el 16 de abril de 1925.

En principio funcionó en el Beaterio hoy Casa de las Misioneras Cruzadas de la Iglesia, ubicada en la calle Soria Galvarro entre Sucre y Murguía.



BIBLIOGRAFÍA



- Torres Sejas, Ángel

1994 Oruro

en su Historia

- Véliz Gonzales,

Gróver, Saravia

Miranda Jhonny y otros

2009 Historia de las Unidades Educativas

Oruro La injusticia de la justicia con los héroes de Oruro

Justicia? Vaya palabra con significado muy ambiguo, aunque no debería serlo, ya que su concepto más sencillo es equidad, igualdad y verdad. Sin embargo, la justicia antes y ahora, siempre será de beneficio para las personas que detenten el poder, ya sea político, económico o social.

La justicia de la época del 10 de Febrero de 1781, no es muy diferente a la que ahora vivimos, quizás es un problema heredado desde la colonia y consideramos que es algo que no cambiará, así se intente decir lo contrario.

Pero, para que se entienda a qué queremos llegar, vamos a dividir esta historia en dos partes. La primera que tiene que ver con la forma de organización de la justicia y cómo se la aplicaba en esa época; y la segunda parte, la injusticia de la justicia en contra de aquellas personas que fueron calificadas como héroes y ese 10 de Febrero de 1781, encendieron la mecha de la libertad en América.



AUDIENCIA

Antes de 1781, la Real Audiencia de Charcas tenía una inseguridad no solo personal sino también a los movimientos de carácter revolucionario, que obviamente fue posterior a la Revolución de Oruro.

La administración de justicia, se las confería a los Alcaldes, que estaban divididos en dos tipos, denominados como alcaldes de primer voto y alcaldes de segundo voto.

Los alcaldes pervivieron hasta poco después de los hechos de 1781. Después de los sucesos del 10 de Febrero, a quienes se consigna a los jueces que administran justicia, eran los alcaldes. La estructura de administración de justicia en la colonia estaba presidida por la Real Audiencia de Charcas, los alcaldes primer y segundo voto, y algunos jueces en materia comercial, un claro ejemplo que el padre de Pantaleón Dalence. También había un sistema de administración de justicia similar al estilo romano ó español, conocidos como jueces de instancia o alzada.

Sin embargo, se conoce que la justicia se resolvía por un cargo que se denominaba como "Justicia Mayor", que atendía casos domésticos como riñas, peleas y otros. Mientras que los hechos de relevancia eran remitidos directamente a la Audiencia de Charcas, y en grado de apelación o consulta al mismo Virreinato. La última instancia confirmatoria o negación de sentencia de primera instancia era la Corte en España con sede en Sevilla.

Hay que tomar en cuenta que muchos de los casos que se ventilaron en Oruro, como la delación de Juan Vélez de Córdoba o el proceso en contra de los patriotas del 10 de Febrero se encuentra archivado en España como última instancia y cuyo proceso tardaba hasta 25 años, como lo que ocurrió con los acusados de la revolución de 1781, que al final se negó la sentencia cuando casi todos los acusados habían muerto en las cárceles de los virreinatos.

Los procesos más famosos que se ventilaban en España, eran casos de propiedades, especialmente de minas. Mientras que en Oruro, son los que tienen que ver con los criminales y se presume que había muchos casos del Nina-Nina, que eran a los que se les denominaba también "corre volando", quienes eran los malhechores que actuaban en la noche.



GUERRA

Por otro lado, Oruro fue un lugar beneficiado, porque fue el centro de la administración de la justicia, al inicio de la Guerra de los 15 Años, porque Chuquisaca estaba siendo asediada por los insurrectos, entre ellos, los esposos Padilla. Hubo un sistema de administración de justicia, cuya facultad era de los oidores de la Audiencia.

Las personas que debían ejercer la abogacía tenían que tramitar autorización de la Audiencia de Charcas; los oidores que trabajaban en la Audiencia, convocaban a los abogados para atender casos e incluso a asumir el rol de juzgadores.

LA REVOLUCIÓN

Ya decíamos que tenemos una segunda parte y esta tiene referencia específica con los hechos del 10 de Febrero de 1781, que muchos historiadores asocian con los levantamientos indígenas de 1780 en el Norte de Potosí con Túpac Katari o en el bajo Perú con Túpac Amaru. Lo de Katari era una convicción de apoderamiento de las Cajas Reales.

Mientras que lo de Oruro, fue algo distinto, donde se habló de la liberación del yugo español para formar una patria, término empleado por primera vez. Prueba de ello, es la proclama del Sargento Sebastián Pagador:

"Amigos, paisanos y compañeros: Estad ciertos que se intenta la más alta traición contra nosotros por los chapetones: Esta noticia acaba de comunicárseme por mi hija; en ninguna ocasión podemos mejor dar evidentes pruebas de nuestro amor a la Patria, sino en ésta; no escatimemos nuestras vidas, sacrifiquémoslas gustosos en defensa de la libertad convirtiendo toda la humanidad y rendimiento que hemos tenido con los españoles europeos, en ira y furor".

No entraremos en detalles de lo que pasó ese día y luego los posteriores, sin embargo, una de las primeras grandes injusticias se vivió unas jornadas del 10 de Febrero, cuando los indígenas con sed de angurria, irrumpieron en la sede de las Cajas Reales, situado en lo que hoy es la calle La Plata esquina Ayacucho.

Sebastián Pagador y un par de soldados eran los encargados de la custodia de esas Cajas, que se dice debían ser entregadas a Túpac Amaru, que nunca llegó a Oruro. En ese intento de defensa, Pagador rompió la cabeza de un indígena, hecho que indignó a estos, quienes sin piedad alguna, fue descuartizado cruelmente en su camino a la plaza 10 de Febrero.

Como estos eran una masa incontrolable, nadie pudo hacer justicia a Sebastián Pagador y este crimen quedó impune hasta estos días.

Pero, no solo este hecho es reprochable, sino la traición de los indígenas hacia los criollos patriotas, quienes fueron entregados como carne de cañón a las huestes españolas, que bajo el delito de traición fueron sometidos a una serie de vejámenes. Los principales cabecillas fueron llevados hasta Buenos Aires y encerrados en lo que se denominó como la "cárcel de Oruro", que era el antiguo colegio "San Carlos" de la ciudad argentina.

Los heroicos mártires de Oruro que fueron trasladados hasta Buenos Aires, con grillos y cadenas, en mulas aparejadas, la enorme distancia de más de 600 leguas; sus imponderables sufrimientos por 19 años en la "cárcel de Oruro" de la ciudad de Buenos Aires… por el delito de amor a la Patria y a la libertad; sugestionaron, sin duda alguna, a los patriotas de Buenos Aires y Montevideo.

Los impulsaron para el inicio de una Guerra sin cuartel contra los españoles, por eso se reafirma que la epopeya del 10 de Febrero de 1781, es considerada como el primer Grito de la América novísima.

Los héroes orureños, nunca fueron condenados en vida, solo después de su muerte en la cárcel, se ordenó que se le corte la cabeza y sea expuesta en la Villa de San Felipe de Austria. Murió el17 de junio de 1793. A Juan de Dios Rodríguez se le confiscó todos sus bienes y de todos sus descendientes. Situación similar pasó con Manuel de Herrera. Mientras que José Menacho y Diego Flores fueron condenados a la horca, para luego ser arrastrados y descuartizados. Todos ellos fueron calificados como reos de primer orden.

Los reos de segundo orden: José Azurduy y Nicolás Iriarte se les castigó cortándoles la lengua y la confiscación de sus bienes. La sentencia fue también para Nicolás Herrera y Miguel Portillo, solo que ellos ya habían muerto antes del dictamen de la pena.

Antonio Quiroz y Juan Gualberto Mejía fueron declarados reos de alta traición a la corona, fueron remitidos a Madrid. El cura Gabriel Menéndez y mano derecha de Jacinto Rodríguez también fue enviado a España. Para Sebastián Pagador, pese a que fue vilmente muerto por los indígenas, el tribunal juzgador determinó que se haga lo que en justicia correspondía. Todos esos elementos demostraron que se realizaron sumarios incompletos y se cometieron una serie de excesos en contra de los héroes orureños, lo que mostró que la denominada "justicia" fue simplemente el castigo que excedió la culpa.



BIBLIOGRAFÍA

CONSULTADA

Torres Sejas Ángel, "Historia de Oruro", Editorial Urquizo 1998. La Paz

Instituto de Estudios Boliviano, "Ensayos Históricos Sobre Oruro", Sierpe Publicaciones 2006. La Paz

Instituto de Estudios Bolivianos, "Oruro en el proceso de independencia", Editorial 2010. La Paz

Entrevistas:

Calizaya Zenobio, Investigador e Historiador

Cazorla Murillo Mauricio, Investigador e Historiador