Don Mariano recibió buena educación; hombre decidido en su acción, instruyó formas nuevas de convivencia humana en una entrega sin condiciones por sus ideales; dueño de sus acciones y respetable; un criollo acaudalado nacido en la ciudad de Cochabamba.
Doy a conocer algunos aspectos de su vida, para lo cual he recurrido a la investigación de fuentes primarias en los archivos históricos. Así, por ejemplo, referente al registro de su bautismo que se encuentra en el Archivo Eclesiástico de la Parroquia de Santo Domingo de nuestra ciudad (Cochabamba), del libro de bautismos de españoles del año de 1773, donde da la siguiente información y a la letra dice:
“En la Villa de Oropeza Valle de Cochabamba en diez y seis días del mes de febrero de mil setecientos setenta y tres, yo el Pbr. Don Manuel Daza The. de cura Rector constándome estar bautizado en caso de necesidad por el Pbr. Don Andrés de Los Ríos Puse Oleo y Chrisma a ‘Mariano Joaquín’ de edad de año Hijo expuesto a las puertas del Licdo. Don Joseph Joaquín de Antezana, fue su Madrina Doña Rosalía Campo y testigos Don Carlos Abasto y Juan Asero y para que conste lo firmé Pbro. Manuel Daza”.
Ésta es su partida de bautismo, en la que fue niño expósito, noticia que ningún historiador había comentado.
Referencias sobre su matrimonio, según el libro de matrimonios de españoles de 1792 a 1802, registra lo siguiente: “Don Mariano había contraído matrimonio con Juana de Dios Urquiza el 4 de mayo de 1793”. Referente a la esposa da la siguiente información: “Doña Juana de Dios Urquiza, española, soltera, hija expuesta a las puertas del Dr. Don Joseph Fernández Barbeito, naturales de esta ciudad” (Archivo Histórico Parroquial de la Iglesia de Santo Domingo).
En cuanto a su formación académica, don Mariano Antezana recibió buena instrucción. Se dice que estudió leyes en la Universidad de Córdova donde se había titulado como abogado. Existen datos sobre que también se ocupó exitosamente del comercio teniendo relaciones, con este motivo, con Lima y Buenos Aires.
Otros dicen que tuvo la oportunidad de viajar a Europa más propiamente a España y Francia, sensiblemente no contamos con pruebas documentales al respecto. Sólo se tiene datos registrados en las escrituras públicas de los archivos históricos de la Gobernación y la Alcaldía, que en octubre de 1805 don Mariano figura como alférez del Regimiento de Voluntarios de Caballería; vecino y Juez Diputado de Comercio de Cochabamba por el consulado de Buenos Aires.
Su casa estaba situada en la calle San Juan de Dios (actual calle Esteban Arze); según información que da Eufronio Viscarra en la biografía del general Esteban Arze, frente a la puerta principal de la Catedral. Referente a la casa de don Mariano existe otro dato en el Archivo Histórico Municipal, en la Caja Nº 15 de la serie expedientes de la República que data de 8 de noviembre de 1830. Dice lo siguiente: “Casa de Don Mariano Joaquín Antezana de altos y bajos situada a la media cuadra de la iglesia matriz en frente”. En cuanto a sus hijos no tengo un registro completo, solo que uno de ellos se llamó Juan Manuel Antezana y otra de nombre doña Bibiana Antezana Barbeito, que se casó con don José Manuel Antezana Casafranca y que fue hijo del capitán Realista don Agustín Antezana y de doña Bacilea Casafranca. Doña Bibiana tuvo los siguientes hijos: Mariano Gregorio, Ángela Francisca, Elbina, Gregoria, de estos hijos Gregorio tuvo un hijo de nombre Prudencio Antezana. Esta información está en el testamento de don José Manuel Antezana, el mismo que data de 1858 y se encuentra en Archivo Histórico de la Gobernación.
Hojeando las escrituras públicas de la época Republicana su viuda, doña Juana de Dios Barbeito, en 7 de junio de 1827, es beneficiada con billetes del crédito público otorgado por el Gobierno de Sucre en que dice: “En atención a los servicios prestados a la causa de la ‘Independencia’ por el Dr. Don Mariano Antezana por los padecimientos de su familia se concede a su Viuda… etcétera”. Y ella procede con ese dinero a la compra de la Hacienda de Quirquiavi (Archivo Histórico Municipal).
Don Mariano participó en la segunda Revolución de Cochabamba, el 29 de octubre de 1811, ocupada la ciudad por el Caudillo de los Valles don Esteban Arze, e instaló la junta Revolucionaria de Gobierno.
Don Mariano Antezana fue nombrado Gobernador Intendente por la patria, pero también se lo denomina como Presidente y Prefecto de la junta para toda la provincia de Cochabamba.
Se sabe también por los informes realizados del soldado argentino Francisco Turpin, elevado al general Belgrano las desavenencias, pugnas y controversias por el poder político regional que surgieron entre Antezana y Arze.
Su sacrificio
Según la novela épica de Nataniel Aguirre “Juan de la Rosa”, Mariano Antezana era de mediana estatura, un poco grueso, sin barba, con ojos claros, de mirada apacible frente rodeada de tez blanca, de cabellos castaños, inspiraba respeto.
Una vez aprehendido producto de una delación desde el convento de la Recoleta, donde estaba asilado, es conducido en horas de las 8:00 de la mañana a la Gobernación ante el general Goyeneche donde se decidió su ejecución con carácter sumarísimo. Antes de ser fusilado dijo a sus verdugos: Amo la libertad de mi país, abdicar de mis convicciones sería traicionadas y prefiero la muerte a ser traidor. Y a su esposa también le escribió una nota: Muero por la patria educa a mis hijos con estos sentimientos adiós, tu marido Mariano Joaquín Antezana.
Mariano Joaquín Antezana fue fusilado a las tres de la tarde en un poyo de adobes en la acera oriente de la plaza llamada del Sol por recibir a este en horas de la tarde, el día de Corpus Cristi, junto a otros que también fueron ejecutados en el cuartel de la compañía mediante el fusilamiento, la horca y el garrote vil, sentenciados por el Tribunal de Purificación o de Sangre formada por una comisión militar. Entre los que fueron ajusticiados están José Gandarillas, Manuel Lozano, Agustín Azcui, Julián Quiroga, Francisco Parrilla, Hipólito Terán, y otros 34 patriotas que murieron en distintos lugares, según Nataniel Aguirre en “Juan de la Rosa”.
El Registro de la defunción de don Mariano Antezana, sacado del libro de Entierros de Españoles de 1812 en la página 143 se registra con fecha 28 de junio de 1812, expresada en los siguientes términos: “Murió en la comunión de los fieles Mariano Antezana Español, casado con Doña Juana de Dios Barbeito de edad de 45 años cuyo cuerpo fue sepultado al día siguiente en esta Iglesia Matriz con oficio rezado, se confesó para morir y mismo recibió el viático y extrema unción de su mano. Fdo. Melchor Rivera Jordán”, según información que se encuentra en el Archivo Eclesiástico de la Parroquia de Santo Domingo.
Ése fue el triste final del Mártir de la Patria, uno de los primeros artífices y visionario de abrir nuevas épocas, nuevas aspiraciones en vías de un progreso social, derrumbando conceptos en instituciones anticuadas. Fue un verdadero revolucionario en pos del verdadero proceso de cambio y descolonización que costó mucha sangre en larga lucha de 15 años de guerra por la independencia.
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