Buscador

domingo, 14 de junio de 2015

Una guerra por soberanía en tierras pocos atractivas

La guerra entre Bolivia y Paraguay, fue a causa de una eterna inquietud sobre la soberanía del Chaco Boreal, una selva densa y poco atractiva, por la enorme cantidad de pantanos inhabitables, además de animales ponzoñosos.

Cuando la guerra comenzó, Bolivia tenía la ventaja de una población tres veces mayor que la de Paraguay, pero tenían la desventaja de la apatía de la población y un Ejército sin deseos de luchar.

La campaña que encaró el gobierno de Paraguay, fue aceptada y respaldada plenamente por sus compatriotas, demostrando más capacidad en sus líderes, además que la comunicación entre los ciudadanos de todos los rincones de ese país era fluida por el pequeño territorio.

Para muchos historiadores, tanto de Bolivia como de Paraguay, esta guerra podía ser evitada, pero los políticos mantuvieron un modo de pensar al estilo del siglo XIX sobre el bloqueo y el desgaste.

Una guerra sin sentido, de masacres insensatas, de cambios vertiginosos de comandantes solo por el hecho de promoción y obtener su "boleto de combate", resultó ser la ruina de las Fuerzas Armadas bolivianas.

Después de tres años extenuantes, Paraguay ganó paulatinamente suficiente terreno y declaró la victoria, pero para muchos el verdadero ganador fue Argentina, que apoyó al Paraguay para proteger sus intereses en el extranjero en la forma de exploraciones de petróleo, ganado y haciendas.

Pese a otras razones, se pretende precisar que el origen del problema estaba en la muy imprecisa delimitación de las fronteras entre ambos países, lo que se remontaba a la época en que estos nacieron a la vida independiente.

Para precisar, el Chaco Austral, territorio argentino; el Chaco Boreal está situado al norte del río Pilcomayo, poblado por unos pocos aborígenes hostiles a las escasas expediciones que se aventuraron por él durante el siglo XIX.

En 1928 se produjo un incidente que hizo temer una guerra que no se evitó, solo se postergó, puesto que en 1931 asumía como presidente de Bolivia, Daniel Salamanca, con la política de "pisar fuerte en el Chaco", traducida en el aumento de guarniciones en la zona.

Las controversias sobre la soberanía del Chaco Boreal comenzaron con la ambigüedad con la que España trazaba los límites administrativos durante la época de la Colonia. Esto tendría sus consecuencias desde la independencia de Paraguay de la Corona Española en 1811; casi de inmediato se hicieron sentir las presiones portuguesas por anexarse el territorio de la nueva república.

A raíz de esto, el nuevo gobierno paraguayo comenzó de inmediato la construcción de fortalezas sobre el río Paraguay para contener el avance de los "bandeirantes", mercenarios al servicio de la Corona de Portugal.

Una en particular (Fuerte Borbón, hoy Fuerte Olimpo) fue construido en el alto Chaco Boreal, donde desde entonces se asentaron las tropas paraguayas. Al independizarse Bolivia (1825), reclamó como herencia el territorio de la Real Audiencia de Charcas, que comprendía el Chaco Boreal, entre otros territorios, basándose en el principio jurídico de "uti possidetis iure", utilizado anteriormente por Portugal para justificar la expansión de sus posesiones brasileñas.

Sin embargo, Paraguay siempre hizo uso de facto del territorio chaqueño, sin que jamás hubiera habido reclamos por parte del Alto Perú en época colonial, época en que la intromisión en jurisdicción ajena era penada con la muerte.

El conflicto en el Chaco se intensificó rápidamente durante el mes de agosto. Al inicio de la guerra, los bolivianos contaban con 4.000 efectivos organizados en lo que se conocía como el Primer Cuerpo del Ejército en la parte Sudoeste del Chaco.

Dos mil hombres, organizados en dos divisiones, estaban acantonados al Noroeste del Chaco, para el mes de agosto, 6.000 refuerzos más avanzaban desde Bolivia; durante el mes de agosto de 1932, los paraguayos bajo el mando del Mariscal José Félix Estigarribia formaron una fuerza de 8.000 efectivos y los organizó en un Cuerpo del Ejército en el pueblo de Isla Poí. 1.500 hombres más fueron atrincherados en ese territorio hizo que, desde la época colonial, nunca se definieran sus límites en cuanto a la dependencia política-administrativa.

Después que Bolivia perdió la salida al océano Pacífico, como consecuencia de la Guerra del Pacífico (1879), esa región adquirió un valor estratégico para ese país.

La ocupación del Chaco Boreal fue necesaria para salir al río Paraguay y tener acceso al océano Atlántico. Otra de las causas era la supuesta existencia de petróleo en el subsuelo chaqueño según la Standard Oil, que ya los explotaba en Bolivia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario