Buscador

jueves, 16 de julio de 2015

Herencia de los ‘revolucionarios’ de 1809



El historiador aymara Roberto Choque Canqui en Situación social y económica de los revolucionarios del 16 de julio de 1809 en La Paz, publicado por la Alcaldía Municipal de La Paz en 2008, describe de manera interesante la estratificación de la sociedad colonial en los albores de 1809.

El trabajo de Choque permite comparar ese periodo con la actual época del “proceso de cambio”. Lo más interesante es saber que esos “revolucionarios” de 1809, sobre todo simbolizado en Pedro Domingo Murillo, tenían un pasado de haber combatido el levantamiento indio de Túpac Katari y Bartolina Sisa en 1781 como también poseer ingente cantidad de bienes materiales y hasta esclavos negros.

La relación conflictiva de Katari y Murillo es un tema vigente en la actualidad, es una especie de propuestas desde las ciudades de Chuquiyapu marka y La Paz, respectivamente y, en este último tiempo sobre la denominación de la plaza Murillo que quiere ser sustituida por Bartolina Sisa.

Las castas sociales en la colonia estaban conformadas por los españoles, criollos, mestizos, indios y negros. Donde lo racial, lo económico y lo social estaban íntimamente ligados. Por su origen, tanto españoles como criollos se sentían orgullosos de ser descendientes de sus abuelos o padres de origen europeo, diferencia racial que daba una posición privilegiada en la estructura de la sociedad colonial.

Por su parte los mestizos, como producto de la relación española o criolla e india, estaban ubicados en el tercer lugar después de los criollos, aunque compartían los mismos valores culturales de origen europeo con los españoles y los criollos, como la religión y las costumbres hispánicas.

El pueblo indio fue considerado menor de edad y marginado racialmente de la participación en el gobierno, la política y la administración pública del Estado colonial español. El indio desde la invasión se vio forzado a ser parte de la servidumbre en beneficio de los españoles, criollos, mestizos e incluso de algunos caciques indios traidores. ¿Cuánto ha cambiado la sociedad de La Paz de esta estratificación colonial de 1809? ¿Cómo es la actual estratificación social de la ciudad de La Paz? ¿Qué continuidades coloniales siguen vigentes y qué se ha modificado realmente?

Uno de los protagonistas de los sucesos del 16 de julio de 1809 fue Pedro Domingo Murillo, quien durante la rebelión india de 1781 y 1782 en el distrito de La Paz tuvo una significativa participación de lucha en la defensa de la causa real y los intereses de los criollos y españoles. Murillo, después de regresar de Cochabamba a La Paz, de acuerdo con su deseo de lucha, cumplió exitosamente la misión encomendada por José Reseguín en los tres acercamientos que tuvo con los jefes rebeldes del movimiento indio.

Pues que en la última acción de paz logró la captura del indio Miguel Bastidas y sus coroneles. De esta manera posibilitó a las fuerzas reales para que ocuparan el Santuario de las Peñas en La Paz donde se encontraban las fuerzas de Túpac Amaru y Túpac Katari. Por el citado trabajo de Roberto Choque, también sabemos que Pedro Domingo Murillo y Romualdo Gemio (sacerdote), pasada la rebelión india encabezada por Julián Apaza y Bartolina Sisa, reclamaron ciertos privilegios por su participación en la captura de Túpac Katari. Hoy en la ciudad de La Paz, ¿quiénes reclaman que la denominación de la plaza Murillo no debe ser modificada? ¿En la continuidad de la denominación de la plaza Murillo, no existe una prosecución del legado colonial?

Otro dato importante es que los “revolucionarios” del 16 de julio de 1809, al igual que otros sectores criollos de la época, poseían esclavos negros en la ciudad de La Paz, y además de emplearlos en el servicio doméstico, los utilizaban como mano de obra en sus haciendas en los Yungas y los valles. La introducción de mayor cantidad de esclavos era evidente, a pesar de su costo elevado en comparación con la mano de obra india más económica para las labores agrícolas, especialmente, en la plantación de la hoja de coca.

A más de 200 años de la herencia colonial del “grito libertario” del 16 de julio de 1809 en la ciudad de La Paz, ¿qué se ha modificado realmente en términos societales? Sabemos que aún existen los criollos, los mestizos y los indios, no solo como clases sociales sino como representantes de civilizaciones españoles e indios, respectivamente. Aunque se suele decir que la ciudad de La Paz es el crisol de la nación boliviana; pero las aristas racializadas y socioeconómicas no han sufrido grandes alteraciones, sino más bien se han complejizado desde aquella experiencia de 1809.

Otra pregunta interesante es ¿cómo fue la participación de las mujeres en la “revolución” de 1809? No existen datos profundamente investigados sobre la participación de las mujeres en 1809, excepto sobre las mujeres de Murillo y algunas de sus hijas, que por su apologización de varios investigadores “murillistas” no nos brindan un acercamiento confiable y por lo tanto la pregunta es ¿qué mujeres o quiénes participaron en la época de 1809?

El que la ciudad de La Paz, es decir, sus habitantes se pongan al hombro el país como otrora nos vanagloriábamos se está acabando, pues los réditos de la redistribución económica que da el Gobierno central no llega mucho a La Paz, un ejemplo concreto es “la guerra del gas” de 2003 que fue encabezada por El Alto y La Paz; pero los que más se han beneficiado de esta lucha son los departamentos productores pero no quienes pelearon.

No hay comentarios:

Publicar un comentario