Con el orgullo de sentirse boliviano, se celebra hoy los 188 años de Independencia de la República de Bolivia, actualmente constituida por razones de orden político en Estado Plurinacional, con una serie de homenajes desde Oriente hasta Occidente, desde el Norte hasta el Sur del país.
Hoy es un día especial para todos los habitantes de este girón patrio, porque el corazón de los bolivianos vibra de alegría y emoción, al ser hijos de esta Tierra, constituida por una Patria rica, no solo en recursos naturales, sino también en cultura, en diversidad étnica y de pensamiento, pese a las adversidades del momento.
En este día se evocan a los revolucionarios, guerrilleros y luchadores que hicieron posible germine la semilla de la libertad en el centro de la América morena. Un proceso que no solo duró 15 años, como se la conoce en historia; sino un proceso ansiado que se inició en Oruro con el "Manifiesto de Agravios" (1739) y siguió con la "Revolución del 10 de Febrero de 1781", momento en que por primera vez Sebastián Pagador, durante su proclama habla de la formación de una "Patria".
Luego dieron su granito de arena otras regiones del país, Chuquisaca, La Paz y así sucesivamente se diseminó la idea de la independencia hasta llegar a consolidar ese objetivo que tuvo como impulsores a Simón Bolívar y Antonio José de Sucre, quienes paradójicamente no firmaron el Acta de la Independencia del Alto Perú.
A lo largo de su historia, y después de ser bautizada de República de Bolívar a la de Bolivia, sus habitantes lucharon incansablemente para tener un país digno y que progrese gracias al fruto del sacrificio y trabajo de sus propios ciudadanos. Si bien el paso de los gobernantes nunca fue calificado como "positiva" se hicieron siempre obras visibles para el desarrollo de Bolivia.
La ubicación estratégica del país, su riqueza en recursos naturales compensaron, en algo, la pérdida territorial que a lo largo de los años se tuvo con cruentas guerras que diezmaron no solo la población, sino también la posibilidad de tener un país más progresivo.
Pese a las adversidades y como lo dijeron en horas precedentes varios ciudadanos, es un orgullo haber nacido en esta tierra, es un orgullo ser boliviano porque solo en este país se puede gozar de la riqueza cultural que se tiene a diferencia de otras naciones, donde la diablada, el tinku, el caporal o la morenada son los tesoros más apetecidos.
Así es Bolivia, poseedora de una diversidad étnica quizás una de las pocas existentes en el mundo, manteniendo una identidad única.
CELEBRACIÓN
Desde días precedentes los homenajes con discursos, actos y desfiles, fueron la esencia de esta fecha. El domingo en la noche, el desfile de los colegios nocturnos e institutos puso en ambiente los festejos, que continuó ayer con el desfile escolar, donde los estudiantes demostraron su fervor cívico con la enseña Tricolor.
Anoche, las instituciones locales también se sumaron al homenaje de Bolivia con el desfile de teas. A la medianoche se esperó con ansias que el reloj marque las cero horas, para entonar a viva voz el Himno Nacional. Hoy la celebración continuará con más homenajes y desfiles, como el cívico, donde los ciudadanos marcharán por las calles del país, henchidos de orgullo y de decir que son bolivianos.
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